𝒮𝑒𝒸𝓇𝑒𝓉♡𝓈 𝑒𝓃𝓉𝓇𝑒 𝒜𝓅𝓅𝓁𝑒 𝓎 𝒟𝒶𝓇𝓁𝒾𝓃𝑔

Capítulo 3

"...Lo siento, no era mi intención escuchar nada. Solamente había subido porque en el baño de abajo estaba ocupado... pero seguro que ya está libre, no os molesto más" Les dijo con una sonrisa nerviosa antes de cerrar otra vez la puerta del baño.

Apple había escuchado todo lo que sentía por ella desde hace años en ese momento, esto ya era la guinda del pastel de esta complicada situación. Se quedaron las dos en silencio, ni Rosabella sabía qué hacer en ese momento. Solo quería que le tragara la tierra, pero esta vez de verdad, que no quedara rastro de ella en ningún lado, por dios.

"¡Darling! ¡Darling! ¡Darling! Deja de mirar la puerta por favor, ya no podemos hacer nada" Su amiga empezó a decir después de un rato, para que saliera del trance en el que estaba.

"...Vámonos Rosabella, quiero irme a mi casa ahora mismo" Sabía que era de cobardes no enfrentarse a Apple después de que supiera su secreto, pero no podía hablar con ella, no era capaz, así que quería ir por la salida fácil que era salir corriendo de esta casa e irse a la suya.

"¿Qué? ¡No!, ¡No!, tienes que hablar con ella en este momento, ahora que sabe sobre tus sentimientos" Le argumentó mirándola.

¿Estaba loca? Ahora que la rubia sabía sobre su enamoramiento hacia ella, que además era otra chica, lo que menos pensaba era ir a hablar. Ya se imaginaba que a partir de este momento, todo el mundo se enteraría de su secreto ¿su familia qué pensaría? En su casa su hermano la odiaría.

"¿Cómo voy a hacer eso? ¡No pienso hacerlo!, ya debe de odiarme en cuanto lo escuchó y seguro que se lo acabara contando a mi familia y entonces ellos..." Se le venían un montón de imágenes e ideas sobre lo que le harían al saber que era lesbiana ¿Porque tenía que haber subido Apple en ese momento?

"¡Darling, no seas exagerada! No estamos en 1900, la homosexualidad no es un tema tabú en estos días, solo ve y habla con Apple. Si puede hablar sobre las veces que ha tenido sexo con tu hermano, no creo que no pueda hablar igual de abierta sobre temas homosexuales"

"Rosabella, no es lo mismo hablar sobre el sexo con tu novio que hablar sobre que una chica está enamorada de ti, eso no es lo normal y menos si encima se suponía que éramos familia política" ¿Cómo pensaba su amiga que era lo mismo?.., para nada era igual que hablar sobre esto.

"Deja de ser una cobarde, ¡Levántate del váter y vete a hablar con ella ahora mismo! Vamos a volver al salón con las demás y cuando veas que se va a la cocina o algo pues la sigues y te vas a hablar con ella, sencillo ¿vale?" Le dijo mientras que la empujaba para que se levantara.

¿Pero a su amiga no le había quedado claro que no quería que la rubia se enterara de sus sentimientos por ella? Se suponía que era una conversación privada y secreta que la olvidarían en cuanto terminaran. Y ahora que la había escuchado la persona que menos debía de hacerlo, le estaba pidiendo que le dijera a la cara lo que había estado intentando disimular tantos años.

"¡Qué no puedo!" No se podía ni mover de donde estaba sentada, mucho menos irse a hablar con ella.

Al final volvió a no saber por qué estaba enfrente de la puerta del salón y no siguiendo protegida en las cuatro paredes de ese baño. Cómo podía hacer tanto caso a Rosabella cuando la mayoría de cosas que le ocurrían malas era indirectamente culpa suya. Lo de venir a dormir, lo de contar sus sentimientos en voz alta en el baño y que lo escuchara Apple... Y aun así aquí se encontraba, a punto de entrar al salón donde estaban todas.

Se sentaron en la mesa del comedor, porque para nada iba a sentarse en el hueco libre del sofá que había al lado de la rubia. Menos mal que su amiga también se sentó a su lado y no en el sofá, porque habría quedado raro, si únicamente fuera ella. No había cambiado mucho la escena desde que se fueron, Briar seguía tumbada en el sofá ahora dormida y las demás sentadas mientras que veían un programa de preguntas que echaban por la televisión. Estaba sudando de nervios y miedo, Apple ni la miraba, solo estaba pendiente al programa, así que fue Rosabella quien rompió el hielo en esta situación tan incómoda.