Bonhomía → Michael Myers x Jake Park ©

XVIII

Danny Johnson y Frank Morrison habían quedado en que esperarían a Max Thompson, Philip Ojomo y Rin Yamaoka en el lago pero en el lapso de tiempo de aproximadamente unos treinta minutos, estos no se habían presentado en ningún momento.

—¡Nos abandonaron! ¡Y aquí estamos solos de nuevo en Crystal Lake! ¿Esto te parece justo?

—Viendolo desde tu lado, lo es pero para nosotros nos favorece —Le respondió Frank, el cual estaba con las piernas sumergidas en el agua al igual que Danny—. Esta máscara ya me está dando calor.

—Uy~ ¿A qué te refieres con qué nos "favorece"? —Le preguntó, con un tono coqueto en su voz— Espera, no te quites la máscara —Frank al oír eso sonrió, ya tenía un nuevo plan en marcha y lo ejecutó al elevar su máscara, dejando su rostro al descubierto—. ¡Hey, pontela! Idiota, te van a ver y... No, no, es mi privilegio ver tu rostro, joder, parezco una colegiala enamorada pero luces muy guapo, demasiado. Frank, vamos... No me tortures así.

—Dan, sé que soy guapísimo, no hace falta que me lo recuerdes porque, bien, si yo lo soy, tú eres escalofriantemente perfecto —Exclamó el asesino mientras que le guiñaba el ojo— Mierda, se me sale ese lado cursi.

—¿Escalofriantemente? ¿Esa palabra existe? —Preguntó burlón Ghostface y sonrió, acercando su mano a la pierna de Frank, apoyándola—. Ahora que tú y yo estamos solos, en la noche... Por si acaso no te preocupes, ¿Vale? Es de noche y no nos van a ver a menos que nosotros los veamos a ellos primero.

Por un momento, Morrison lo pensó, estaba algo de acuerdo con la idea que el otro quería dar a entender y eso lo hizo notar cuando apartó un pie del agua, dejándolo a un lado mientras que atraía a Danny hacia a él, teniéndolo en frente suyo.

—La idea es ser cuidadosos, por las dudas pero, santo cielo, deberías quitarte la máscara, quiero verte o... —Hizo una pausa y en eso, con sus dedos pulgares, subió la tela de la máscara de Ghostface y la sacó completamente, admirando el rostro de Danny, los ojos grises con las pupilas ligeramente dilatadas y el pelo rubio—. Mejor lo hago yo... ¿Por qué tienes que ser tan... Perfecto?

—Sé que tu heterosexualidad se fue cuando me viste —Rió y sostuvo su máscara para posteriormente dejarla a un costado, así, Danny recostó sus manos en los hombros de Frank—. Tu cicatriz te hace jodidamente caliente.

—Oh, no empecemos con eso de nuevo, ven y dame de probar aquellos exquisitos labios tuyos que tienes —Murmuró Frank, algo ido por la tentación que le provocaba estar en esa situación.

Danny sin pensarlo, estrelló sus labios con los de Frank, ladeando la cabeza mientras que cerraba los ojos, enrollando sus brazos en el cuello del asesino. El integrante de La Legión también le correspondió, repitiendo el mismo acto pero esta vez, abrazando su cintura con su extremidad izquierda y con la derecha, la recostaba en la espalda de Johnson.

Ghostface se alejó, con una leve sonrisa en sus labios, algo que confundió a Frank pero de inmediato le entendió como le empujó, haciendo que su espalda quede totalmente acostada en el frío y descarado suelo de madera del lago. De inmediato Danny se colocó a horcajadas sobre él y regresó a besarlo, agarrandole de la nuca mientras que ejercía un poco de presión.

Pero lo que ellos no notaron, es que del lago, aquella agua cristalina, helada y lúgubre, empezó a resurgir algo u quizás, alguien debajo de ellos.

Se trataba de nada más ni nada menos que de Jason Voorhees, el cual había estado presente allí en ese ambiente tan "sexual" por parte de Danny y Frank desde que comenzaron.

Su cabeza se dió a conocer y luego el rostro, el cual estaba completamente cubierto por la máscara. Al ver lo que estaba pasando se las ingenió para hacer algo que alertaría a los dos asesinos.