Parte 35 Siempre es oscuro antes del amanecer

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Sorprendido por ver a su padre, Lan Shen se quedó sin palabras y a la vez  estaba un poco avergonzado. Cuando se trataba de este tipo de situaciones era inseguro y le faltaba valor. Era débil.

Jiang Cheng no miró a su hijo mayor  en ningún momento, su mirada estaba  centrada en Lan Xuan. Sus cejas se frunció más profundo de lo habitual al darse cuenta que se trataba de una desviación de qi y no parecía ser una normal.

El silencio de Jiang Cheng puso nervioso a Lan Shen— ¡Padre, A-Xuan...!

Un repentino golpe nubló la visión del Lan Shen y cayó inconsciente siendo atrapado por Jin Ling. Lo recostó sobre la silla y preocupado miró a su tío — ¿Estuvo bien eso?

—En su estado ¿Qué puede hacer? Solo me estorbara —Jiang Cheng cerró sus ojos molesto—No debería estar aquí de todas formas, una vez que despierte dile que regrese a GuSu. Es una orden.

—A-Huang no estaba bien, seguro..—Jing Lin suspiro incapaz de continuar lo que estaba diciendo. Miró el perfil de su tío preocupado un momento, luego salió de la habitación para buscar al curandero de la secta.

En ese mismo momento, Lan XiChen entró y vio a sus tres hijos inconscientes. Su corazón dolió como si una flecha lo hubiera atravesado y la sangre que se derramaba lo llena de dolor, enojo y  lamentos.

Se acercó a Jiang Cheng, pero este lo fulminó con la mirada deteniéndose sólo a tres paso de su esposo.—A-Cheng no tienes que ser tan duro..

— ¿Y que si lo soy? ¿Ahora usarás tus estatus como alfa y los corregirás? — Todo el dolor que Jiang Cheng sentía en su pecho se transformó en enojo al escuchar las palabras de su esposo.

Ese fue un golpe doloroso para Lan XiChen, no podía negar que casi no estuvo presente en la educación de sus hijos y Jiang Cheng siempre fue estricto con ellos, sobre todo desde que supo que Lan Xuan era un alfa ha sido más exigente con él.

—No pretendo hacer eso, aunque quisiera en este momento no puedo ayudar a A-Xuan —Dijo tras un corto silencio.

— Se que la secta Jiang es importante para ti, por eso no debes ser suave con A-Xuan, pero A-Cheng estoy preocupado por ti, eres suave de corazón no soportarías ver a tus hijos sufrir. Quisiera poder tomar tu lugar y soportar esa angustia por ti.

Una tormenta de emociones pasó por los ojos de Jiang Cheng, sus labios temblaron al querer decir algunas cosas, pero al final se las guardó para sí mismo. Solo apretó sus manos a cada lado de su cuerpo.

Su lenguaje corporal fue evidente para Lan XiCheng. Se acercó y lo envolvió con sus brazos y una de sus manos cubrió la palma de Jiang Cheng que sostenía a Zidian.

—Estaré aquí contigo. No puedo soportar tus cargas, pero puedo sostenerte en mis brazos.

Los hombros de Jiang Cheng dejaron de estar tensos y aunque no estaba del todo relajado, después de una noche llena de angustia, respiro aliviado.

—Patético ¿Es todo lo que puede hacer el ex líder de la secta Lan?

A Lan XiChen no le importó esa burla y dijo— Soy el hombre más débil del mundo cuando estoy contigo.

A Lan XiChen no le importó esa burla y dijo— Soy el hombre más débil del mundo cuando estoy contigo

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