Destino: Tómame

Capítulo 28

Esmeralda

Estas dos semanas las cosas habían estado mal, estaba deprimida y más distraída de lo normal pero había aparentando bastante bien delante de todos. Las chicas y yo habíamos quedado un par de veces, la primera vez invente algo y me quedé en casa y la segunda me recogieron en la escuela y así evitaron que pusiera más pretextos. Hoy no se como termine aquí pero estoy preparando una ensalada en la cocina de Mica, se que es su cumpleaños pero mi estado de animo no habría puesto resistencia alguna si hubiera decidido quedarme en casa.

Escuché que alguien había llegado y supuse que era Majo ya que Tess y Jimin son los más tardados para todo, a ellos tienes que decirles que la fiesta será como 3 horas antes para que lleguen puntuales. Sonreí al pensar en ellos discutiendo porque ya es tarde mientras se culpan el uno al otro aunque ninguno de los dos esté listo. Tome la ensaladera y salí de la cocina para dejarla en la mesa, estaba pensando en Tess y Jimin cuando me di cuenta de quien había llegado.

Mi corazón se aceleró y sentí que la sangre abandonaba mi cara, tenía dos semanas sin verlo pero en ese momento me parecieron años, seguí todas las líneas de su rostro y sus brazos hasta que me encontré con su mano sosteniendo la de ella. No había notado la presencia de Sarah hasta ese momento, pero no fue hasta que él la presentó como su prometida cuando mi corazón terminó de hacerse cachitos. La habitación había quedado en silencio y sentí que todos escucharian como me rompía por dentro, tomé aire y camine hasta la mesa, necesitaba apoyarme en algo o me iba a caer, sentía como mis piernas temblaban y no quería que fuera tan obvio.

No quería escuchar lo que hablaban respecto a su relación, me levante y me fui con Mica que estaba terminando de preparar las cosas en la cocina pero ella no paraba de quejarse mientras yo arreglaba la charola con pan.

-¿Que hace ésta acá?- dijo -La detesto y ni siquiera la conozco, me parece de pésimo gusto que Tae la haya traído sin preguntar. No es un día normal.. ¡Es... Mi... Cumpleaños!
-Pero Tae es de la familia- dije sin ganas de hablar
-¡Pero es mi fiesta!
- Pero es su prometida- dije y sin darme cuenta una lagrima resbaló por mi mejilla. Mica me dio una servilleta y seco mi lagrima con su dedo
-Lo siento amiga, me he estado quejando sin preguntarte ¿Como estás?- estaba a punto de desmoronarme con mi amiga cuando la voz de Lex se escucho más cerca.
-Hola chicas, ¿En que ayudamos?- dijo Lexy entrando a la cocina con Sarah detrás de ella. Sus ojos se detuvieron sobre mi y sus sonrisa burlona apareció.
-Si, Lex puedes checar la pasta y... ¿Sarah, verdad?- dijo Mica -me ayudarías a ponerle mantequilla y sal con ajo a los panes para meterlos al horno.
-La verdad es que no quiero que mis manos huelan a ajo- dijo Sarah viendo sus uñas -pero puedo llevar esto a la mesa- tomo los cubiertos que yo estaba ordenando y salio de la cocina. Mis amigas y yo nos volteamos a ver sin poder creer lo que había sucedido, tal vez no era gran cosa pero su actitud era odiosa y era obvio que solo estaba aquí para que viera que ella había ganado.

Más tarde, después de que Sarah le insistierá a Tae en quedarse un rato más, como si la estúpida de verdad se estuviera divirtiendo, terminamos de comer, todo había estado delicioso pero el ambiente era muy incómodo. Nada fue como siempre, en todas las comidas familiares, como les llamamos, siempre dejamos los teléfono de lado y platicamos entre todos, no hay secretos ni  incomodidad, hoy había silencios y había platicas privadas, Tae y Sarah platicaban y reían entre ellos mientras los demás solo los observábamos. Jimin y Hobi platicaban algo gracioso de vez en cuando para ver si el ambiente se hacía un poco más ligero, pero no duraba mucho.

Al terminar la comida Tae susurró algo en el oído de Sarah y ella le sonrió.

-¡Ya nos vamos!- dijo Tae levantándose de la mesa y capturando la atención de todos- tenemos cosas que hacer
-¡Bebé!- dijo Sarah exageradamente y dio un ligero golpe a su brazo- no tienes por qué contarles todo
-Bueno Sarah, aquí suelen ser así las cosas. No invadimos la privacidad de nadie, pero tampoco nos guardamos secretos, normalmente actuamos como una familia, principalmente en reuniones como esta.- dijo Nam levantándose de su silla y caminando hacia ellos -Necesito hablar contigo mañana en la casa- dijo y siguió de largo.

Tae se empezó a despedir de las chicas con un beso y un abrazo, tardo un poco más con Mica mientras Sarah solo decía adiós con la mano y se daba la vuelta.

- Te espero en el auto, bebé-dijo y salió de la casa

Sabía que en algún momento Tae tendría que despedirse de mi y para ahorrarnos la incomodidad empecé a a limpiar la mesa, tomé los platos sucios y los llevé a la cocina. No había pasado ni diez segundo cuando Tae entró tras de mí, al darme cuenta de que era él decidí salir de ahí, quise pasar a un lado de él y me todo del brazo, me llevó hasta la pared al otro lado de la cocina, se paro frente a mi y coloco una mano en la pared junto a mi cabeza.

-La mayoría de nuestros encuentros son así...- dijo viéndome a los ojos -conmigo acorraladote- mojo sus labios con su lengua -Solo vine a despedirme- Tae me dio un beso en la en la comisura de mis labios.
-¿Me extrañas?- preguntó en mi oído
-No- conteste
-¡Bien!- dijo él y dio media vuelta

Un minuto más tarde Mica, Majo y Lex entraron a la cocina y yo me deslice contra la pared hasta que me senté en el suelo. Mi teléfono sonó y abrí el mensaje que había llegado.

*Los ojos no saben guardar secretos*

Me conocía, Tae sabía que yo estaba mintiendo y se estaba burlando de mi. Empeze a sollozar mientras las chicas se acercaban a consolarme, pensé que sería fuerte y aguantaría todo el día de hoy sin llorar, pero fueron demasiadas emociones. Odio amarlo todavía y odio aún más saber que no signifique nada para él. Agradecí el hecho de que mis amigas no preguntaran nada, solo estaban ahí para darme ánimos.

Hobi tenía planes con Mica, así que después de limpiar ellos se fueron, Majo tenía que ir a ver a los papás de Jin y los demás ya se habían ido. Lex decidió pasar la noche conmigo ya que Nam tenía que viajar en la madrugada por cuestiones de trabajo.

-¿Quieres hablar de algo? - me pregunto Lexy una vez que nos acostamos
-No lo se- suspire -Se que tu no me creíste cuando les dije que Tae y yo habíamos decidido terminar
-Bueno, para empezar no somos ciegos, era bastante obvio lo que sentían él uno por él otro.- dijo Lex
-Si, al parecer fue una buena actuación.- dije perdiéndome en mis recuerdos, y es que de verdad había sido una actuación increíble de su parte, siempre demostró tener sentimientos hacia mi y lo que no me explico es lo lejos que llevo todo simplemente para un acoston.
-¿Quieres decir que Tae fue quien te dejó? ¿Que te hizo, Esme?
-La verdad es que no quiero entrar en detalles, ahora él está con ella y es obvio que no hay nada en el futuro para nosotros, si es así entonces tampoco me interesa el pasado. Seguiré adelante.

Claro que dolía. Dolía muchísimo, pero no me iba a morir por esto, la vida seguía y yo sería mucho más miserable sufriendo por él. La noche se alargo un poco más, Lex y yo platicamos sobre todo y sobre nada en especial, eso me hacía sentir más cómoda.