Destino: Tómame

Capítulo 40

Taehyung

Después de encontrarme con Esme y convencerla de que fuera a comer con nosotros, subimos al auto y mi cuerpo no obedecía mis órdenes, casi la beso al querer ponerle el cinturón de seguridad, todo había estado calculado dentro de mi mente hasta que me vi rosando mis labios con los suyo. Mi plan es recuperarla pero debo ir despacio, necesito enamorarla de nuevo y debo ganarme su confianza otra vez, pensará que estoy loco si simplemente la beso en cada oportunidad que tenga. Intenté entablar una conversación y note que me mentía cada que mencionaba que estaba bien, se le olvida que la conozco muy bien. Llegamos al edificio y di la buelta al auto, abrí su puerta y la tomé de la mano para entrar, una vez en el ascensor sentí como su cuerpo se tensaba y supe que se alejaría de mi.

-Debes dejar de hacer estas cosas- dijo con su mirada hacia abajo, seguía herida y esto me molestaba bastante pero también significaba que aún sentía algo por mi.
-¿Hacer qué?- dije y camine hacia ella pero el elevador se detuvo
-Hacerme más difícil el olvidarte- me respondió y salió casi corriendo hacia el pasillo. La alcance cuando se detuvo frente a la puerta del departamento y antes de abrir susurré en su oido
-¡No dejaré que lo hagas!- abrí la puerta y entré

La cena estuvo bien y las chicas tomaron un poco más de lo debido, en realidad fue Esme la que bebió de más, Lex solo le siguió el juego y después fingieron que no la podían llevar a casa lo cual no fue ningún problema, al salir los chicos del departamento boltee a ver a Esmeralda y ya estaba dormida sobre la mesa. La tomé en mis brazo y la lleve a la cama, me recosté a un lado de ella para observarla, extrañaba tenerla tan cerca, sentir su el color de su cuerpo cerca, extrañaba hablar con ella o simplemente estar a su lado. Extrañaba todo, desde el más mínimo detalle, y ahora que la tenía cerca no me bastaba, sabía que aún no era mía y que no podía abusar de su estado solo por no poder detenerme. Estaba viéndola dormir cuando una lágrima corrió por su mejilla, empezó empezó balbucear cosas que después de segundo se escuchaban más claras.

-¿Por qué me lastimas?... ¿Por qué me sigues haciendo daño?... No te das cuenta que aún te amo ... Tae, no me dejes... te lo ruego- mi corazón se hizo pedazos al escucharla, es obvio que todo lo que dice es verdad, estoy seguro que es todo el dolor y rencor que hay en su corazón.

Besé su frente y acaricie su cabeza para tranquilizarla, cuando me di cuenta había empezado a contarle todo lo sucedido, se que esta dormida y que aún estando despierta, Esme no estaba en condiciones para escucharme, pero necesitaba hacerlo. Desde ese primer maldito segundo en que Sarah entró a la habitación a contarme lo sucedido había sentido la inmensa necesidad de contarle todo a Esmeralda, habría dado todo por que ella estuviera a lado mio en todo esto a tener que alejarla, pero ya esta, no puedo hacer nada más que recuperarla.

-Te voy a recuperar y me voy a encargar de compensar todo lo que te hice pasar.- le dije y lo decía en serio. Daría mi vida por esta mujer.

La abrace y su calor me hizo sentir tan cómodo que me quedé profundamente formado, como hacía meses que no dormía. De pronto sentí un frío extraño, algo hacía falta y desperté de golpe, Esmeralda se había ido y no la culpo, seguramente despertó y aún seguíamos abrazados, se que esta buscando olvidarme y esto seguro que se sintió como un gran retroceso para ella. Me levante y me di una ducha, hoy aún tenia trabajo aún que la verdad no quería ir. Salí del baño y tome mi celular, abrí una de mis redes sociales y vi un foto extrañamente familiar, mi mente intento analizar en donde había visto esa boca hasta que caí en cuenta que era yo, voltee la vista a ver quien había publicado esto y no lo podía creer. Esmeralda había subido esta foto, el texto era la respuesta a la lectura del libro que le pedí a la chica que hiciera en su clase.

*...Debo decirle que ha embrujado usted mi cuerpo y mi alma, y que lo amo, lo amo y lo amo. Y que ya nada podrá separarme de usted...*

Corrí al auto y en el camino le hable a Nicole para que avisara que no me presentaría hoy, llegue a casa de Esmeralda y en cuanto abrió ataque su boca. Toda la noche había rezado por no perder el contro y ella me había perdonado, no me importa ser un poco agresivo en mi beso, quería que ella supiera todo lo que sentía, todo lo que la había exteañado y mi promesa de no volverla a dejar. Comenzamos con un beso y terminamos en su habitación, disfrute de cada centímetro de su cuerpo, como si no hubiera un mañana.

Salimos a la cocina y preparamos el desayuno, Esme tenía puesta mi camisa y su ropa interior, lo que la hacía verse sumamente sexy. Platicamos de todo lo ocurrido en estos últimos meses, lo de la demanda, lo del viaje, platicamos sobre su amiguito y sobre Sarah. Ideamos algunos planes basados a lo que planee con los chicos, el sábado tengo la reunión con el escritor y sus abogados, Sarah también esta citada y esperamos llegar a un acuerdo. Esmeralda y yo seguimos platicando y después vimos una serie que dejamos pendiente después de algunos capítulos ya que nos entretuvimos en el cuerpo del otro nuevamente. Quería quedarme pero aun teníamos un día más de trabajo en esta semana y yo no tenía ropa aquí aparte mañana viernes hay una reunión en mi departamento Nam y Lex la organizaron ya que vamos a celebrar que abrirán su próxima galería y se quedarán ahí hoy. Nadie sabe que regresé con Esme y preferimos que siga siendo así por lo menos hasta el sábado.

Llegue del trabajo y Nam y Lexy tenían todo listo para el festejo, habían acomodado los muebles de manera que el salón se veía más amplio y tenían una esa con bebidas y bocados.

-¿Creen que sea suficiente para todos?- pregunto Lex observando la mesa
-Supongo que si, siempre somos los mismos, nena- le respondió Nam abrazándola por la espalda
-Pienso que nada es suficiente cuando hablamos de JK y la comida- dije riendo -Además, invite a alguien
-¿Alguien?- pregunto Lex y sentí que se puso nerviosa
-Si, le comenté a Sarah y dijo que vendría
-Bueno, no eres el único con compañia- dijo y se metió a au habitación.
-¿Qué pasa? ¿De qué habla?- le pregunté mi hermano y él solo levantó los hombros dándome a entender que no sabía nada.

Unas horas más tarde, las chicas y mis hermanos empezaron a llegar a la casa, Sarah también había llegado así que le abrí la puerta y cuando estaba apunto de cerrar alguien la detuvo por fuera. Volví a abrir y vi a Esmeralda, se me secó la boca en el momento en que la vi, estaba hermosa y venia acompañada. Mantuve mi mirada sin ninguna expresión, ella le hizo una seña a él para que pasara y cuando ella camino a mi lado, me guiño un ojo.

-¡Que comience el juego, bebé!- dije susurrando a su paso.