Capítulo 24.

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¡Celebración!

23 de diciembre del 2018.

—Está bien... Sí... Necesito que te encargues de la prensa, al no ver a Sam en mi graduación crearon cientos de rumores y no necesito más... Sí, Kira se fue con él... —Keelan escucha la voz de la castaña desde la distancia lo que lo obliga a abrir los ojos que son bañados en lleno por el furioso sol de la mañana. Con el cuerpo desnudo y la verga erecta, se levanta y sale de la habitación encontrándose a la castaña envuelta en un kimono blanco mientras habla por teléfono de espaldas a él. —Sí, sería una buena excusa... llamaré a mi padres y... —Sus palabras se ven interrumpidas al sentir la punta de la verga de Keelan oprimiendo la entrada de su vagina. —Está bien, nos vemos está noche... —Responde con voz jadeante sintiendo como este se introduce despacio entre sus paredes. Corta la llamada, deja su teléfono sobre la isla a su lado y gira el cuello encontrándose con los ojos brillantes del ojiazul. —Un ''buenos días'' estaría bien... —Bromea.

—Las acciones valen más que las palabras —Saca la mitad de su verga volviendo a arremeter con fuerza. <<¿Nunca me sentiré saciado del fuego interior de esta mujer? ¿De su calidez, su rebeldía, su libertinaje, su independencia, su... su esencia en sí? ¿Cuándo tendré suficiente de ella?>>. Se pregunta el castaño escuchando los gemidos escandalosos de la castaña. La toma de las caderas y la sube sobre la isla metiéndose nuevamente entre sus piernas. —¿Qué tan buenos son? —Pregunta con altanería mientras desamarra el cordón del kimono que lo mantiene ajeno a su desnudez.

—Buenísimos —Jadea clavando, inconscientemente, sus perfectas uñas en la espalda del ojiazul dejando marcas que dentro de poco se pondrán coloradas. —¡Dios, sí! —Exclama en un grito cuando Keelan toma uno de sus pezones entre sus dientes mordiendo suavemente. —¡Sí, papi, sí! —Chilla sintiendo como la verga de Keelan se tensa en su interior mientras sus nervios se contraen haciéndoles saber que están a punto de venirse a la par.

—Vamos, i ómorfi gynaíka mou... —[mi hermosa mujer]. —...córrete, vamos, ordéñame la verga... —Jadea al mismo tiempo en el que se corre dentro de ella con abandono. No había vuelto a coger con una mujer sin utilizar condón desde sus primeros dos años de matrimonio con Adara, pero ciertamente no le importa mucho utilizarlo ya que sabe que Bárbara utiliza un método anticonceptivo, y bueno... se siente endiabladamente bien estar en su interior sin ningún tipo de barrera. —Buenos días —Brama saliendo de su vagina con la respiración entrecortada y el pene medio flácido.

—Buenos días —Responde con una sonrisa. —Y muy buenos —Se carcajea cuando Keelan le ofrece una vista de su trabajado culo.

—Traviesa —Bromea enmarcando su rostro. —¿Con quien hablabas tan temprano? —Pregunta luego de dejar un ligero beso en sus labios.

—Mandy, está noche las chicas y yo daremos una fiesta para celebrar nuestra graduación —Le cuenta. —Espero que no estés tan ocupado como para presentarte...

—Estaré allí, neossós —[nena]. Responde viéndola a los ojos y comprendiendo que se encuentra bajo su hechizo y que nunca volverá a ver a otra mujer como la ve a ella. <<¿Quién diría que te enamorarías de una chiquilla doce años menor que tú y tan rebelde como una leona enjaulada deseando ser liberada>>.

—Tendrá un estilo de los años 20's aunque algo más moderno y chic —Cuenta atando el lazo del kimono volviendo a cubrirse. —También hablábamos sobre la fiesta del lanzamiento de mi marca...

—¿Compraste la empresa Aphrodite? —Pregunta sin avergonzarse por su desnudez.

—¿Cómo lo sabes? —Eleva la mirada topándose con esos profundos y hermosos ojos cielos.

En las Garras de la PasiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora