Capítulo Final.

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Paz...

24 de mayo del 2019.

—Brittany —Exclama Sam viendo a la chica a la distancia quien luce aparentemente sorprendida al darse cuenta de su presencia en el edificio de oficinas en el cual se encuentra el espacio que adquirió pocos meses después de graduarse en la carrera de Economía obteniendo una licenciatura.

—¿Qué haces aquí? —Pregunta mientras se acerca a él con una actitud misteriosa, como si deseara que nadie los viese conversando.

—Vine a verte, quería saber si te gustaría salir esta noche...

—¿Disculpa? —Retrocede. —Hace más de un mes cogimos como conejos toda la noche y al otro día ni siquiera volteaste a verme, ¿que te crees? —Gruñe enojada descargando los sentimientos que ha estado oprimiendo en su interior. —No voy a ser una más de las mujeres que solo buscas para coger... —Se da la vuelta e intenta alejarse con el corazón latiendo desembocado, pero la gran mano de Sam alrededor de su brazo se lo impide. —¿Qué quieres? —Pregunta girándose a verlo con ojos chispeantes de rabia.

—Nunca te consideré una de esas mujeres... —Acaricia su mejilla en un vago intento de calmarla.

—¿¡¿Entonces, que haces aquí?!? —Eleva la voz obteniendo la atención innecesaria de otros socios y propietarios de demás oficinas.

—Vine por ti... —Responde sorprendiéndola con sus palabras.

—Es tarde, Sam, muy tarde —Lo mira directamente a los ojos. —Me iré del país...

—¿Qué? ¿Por qué? ¿A donde? —Pregunta pasando por alto el rechazo reflejado en los ojos de la chica.

—Me iré a España con un viejo amigo...

—¿Te irás de aquí detrás de un mal polvo? —En ese momento la delicada mano de Brittany se impacta en su mejilla logrando frenar sus demás palabras.

—No vuelvas a tratarme como una cualquiera, no soy Katrina —Gruñe molesta. —Me iré a donde me dé la gana y detrás de lo que quiera, no es un asunto de tu incumbencia... —Intenta alejarse nuevamente, pero Sam la toma de la cintura impidiendo su paso. La rubia queda de espaldas sintiendo la respiración del hombre en su nuca y un delicioso perfume se cuela en su nariz.

—Iré por ti a donde sea, Brittany, y te aseguro que si otro hombre te toca, lo mato...

—No vayas detrás de mí —Pide sabiendo que de este hacerlo, se rendirá en sus brazos. —Ve detrás de tu independencia, de tu resiliencia, ve detrás de tu futuro...

—Te quiero a ti en mi futuro —Pide oliendo la exquisita mezcla de miel y leche que conforman el shampoo que utiliza la chica. —¿Qué debo hacer para tenerte?

—Dame tiempo... —Pide. —Sanemos y luego, si el destino esta a nuestro favor, nos reencontráremos, de lo contrario me alegrará saber que estarás bien —Se suelta de su agarre y se aleja de este dejándolo atrás como guardián de su corazón, el corazón que ella le entregó antes de marcharse de su cama aquella mañana hace un mes.

Horas después...

—Me sorprendió que sí quisieras verme, la mayoría de los chicos me detesta tras la foto en esa revista francesa, todos se pusieron de lado de Barbie y eso que a penas la conocen, no como a mí que llevamos años conociéndonos.

—Yo decidí no ponerme del lado de ninguno, no soy tan infantil como los demás —Declara Ezio, ex cuñado de Keelan. —Lo que no entiendo es por qué terminaron si tú la amabas y ella a ti...

En las Garras de la PasiónWhere stories live. Discover now