ONE SHOTS

60-Mason y Pierce

Mi desesperada decisión
Ariana Godoy

Mason y Pierce

Suelo ser una persona no muy estable, mi cabeza es todo un caos, nunca puedo lograr estar bien, nunca lo logré, hasta que llegaron ellos.

Mire el espejo y atrás de mi estaba llenó de lobos y personas con cabezas de cerdo.

Mis manos comenzaron a temblar, pero y sus gritos y aullidos hacían eco en mi cabeza.

Mire la sangre que estaba en mis manos, la limpié con mi blusa para después entrar a al baño y lavarme las manos, levanté mi mirada y estaba llena en la cara, también la lavé.

Mire a mi vecino de cuarto para locos, moví mi cabeza para poder mirarle mejor.

-Aquí está su medicamento, porfavor-. No la deje terminar.

Tome su pluma y la encajé en su ojo, ella chilló y salió corriendo.

Yo solo me senté en el suelo observando y esperando a que me vengan a inyectar un tranquilizante.

Tome mi cabello y lo ate en una cola alta, mire mis ojeras en el espejo y comencé a cubrirlas.

Mire a un chico de ojos grises rondar el lugar por las noches, una tarde atrás había golpeado a mi compañero loco.

El camino hacía allá pero antes de que siguiera paro y me miró.

Mi cara indefensa y las lágrimas que salían de mis ojos eran señal de que tenía miedo.

Aunque en realidad no lo hacía.

El se acercó.

-¿Porque lloras?-. Pregunto.

-Me trajeron en lugar de mi hermana-. Chille más.

Esa noche el prometió sacarme.

Tome el labial rojo que estaba en mi bolsa y lo unte en mis labios, sonreí al verme.

Quite el vestido que tenía puesto y me puse una blusa blanca con unos jeans negros.

-Nos estás manipulado-. Me dijo Mason.

-Yo no he manipulado a nadie-. Respondí sin mirarle.

-Claro... y yo no soy un Psicópata-. Dijo burlón.

Caminé paso afuera y mire el cadáver de mi hermana y madre, sonreí al verlo desangrando.

Tome un cuchillo y me herí el brazo y el abdomen, mire a mi alrededor manche con sangre una línea y me escondí.

La policía llegó minutos después, al encontrarme me apuntaron pero al verme herida y que les diera mi declaración me dejaron como testigo protegida.

Antes de irme en un auto donde estarían los protegidos, mi mirada conecto con una que tanto me gustaba.

Una gris.

Antes de salir del encierro en el que me encontraba mire a Pierce.

-Te encontraré-. Me dijo.

-Lo harás, te la pondré facil-. Dicho eso lo bese.

Era un beso lleno de posesión.

Me separé de él y mire a Mason.

-Nos vos pronto-. Dije caminando a el.

-Solo saquen a Fleur de acá, cuándo lo hagan, busquen me-. Dije para después salir de acá.

Mire al conductor.

-Pare el auto-. El no me escucho.

-¡Pare el auto!-. Así lo hizo.

Me miraba confundido, bajé del auto para mirar a todas partes en busca de su mirada, ahí la encontré, el al verme me sonrió.

Corrió a mi y me abrazó.

-Después de tanto tiempo-. Me dijo sonriente.

-Solo fueron tres años-. Soltó una carcajada.

Una voz a mis espaldas hizo que me separará de Pierce, volteo a verlo y el sonreía malicioso.

-Si, solo tres años-. Dijo burlón.

-No fue tan fácil como dijiste, bonita-. Asentí riendo.

-No sería divertido, ojitos-. El sonrió.

-Vamonos, hay mucho que hacer-. Me dijo.

Ambos me tomaron de la mano y salimos de allá.