111- Heiner Stein

1.7K 129 23
                                    

Heist
Ariana Godoy.

A pedido de WJ-YB-LK

Heiner Stein.

No recuerdo que hayan mencionado alguna vez el apellido de Heiner.

Suspiré mirando mi cama, estaba en el suelo, al parecer me había caído en la noche.

Lo cual era gracioso.

Mire el reloj en la pared, apenas eran las dos cincuenta, sin razón alguna salí a el jardín.

Mire un conejo, parecía estar herido, me recordaba un poco a mí erizó y eso no tenía sentido.

¿En qué podría parecerse un conejo a mi erizó?.

Definitivamente en nada.

Caminé a el, me puse a cuchillas mirando que no había laguna herida en su cuerpo, le miré confundida.

La sangre era ajena, miré al frente la sombra de un hombre escondido entre los árboles llamo mi atención, lade mi cabeza ora después sonreírle.

- ¿Es tu conejo? - no obtuve respuesta alguna.

- Supongo, creí que estaba herido... si lo bañas quizás la mancha se vaya -

Levanté al conejo y miré donde el chico, di unos cuantos pasos al frente notando que el hombre se escondía cada vez mas.

- Señor... solo le entregaré su conejo -

Bajé al conejo a una distancia cuerenete de aquel desconocido.

Mire cómo tomaba el conejo sin mostrar aún su rostro.

Aquel chico se asomó dejando que le viera.

Parecía un chico de unos veintiséis años.

Di la vuelta caminando de regreso cuando una mano en mi hombro me detuvo, di la vuelta mirándole, sonreí para después quitar una mancha de sangre en su mejilla.

El solo sonrió para soltarme y susurrar que fuera a dormir, y así lo hice.

Aquel sueño se repetía una y otra vez en mi mete, no lograba entender.

Mire el reloj como cada noche que despertaba, eran las dos cincuenta, por primera vez en ocho años salí afuera al jardín, mirando aquel lugar donde el sueño se repetía una y otra vez.

Un conejo se asomó dejando ver una clara mancha de sangré.

Me agache para recogerlo y mirar al frente.

Aquella sombra.

Pasé saliva para después caminar hacia el.

- ¿Disculpe? - No hubo respuesta alguna.

No lograba ver aquel rostro, pero me parecía tan familiar.

ONE SHOTSWhere stories live. Discover now