𝐑𝐨𝐥𝐞𝐩𝐥𝐚𝐲 L.

𝑻𝒓𝒆𝒏𝒕𝒂𝒅𝒖𝒆

Solo vos
.

Monzón

Editado.
Después de pedirle que pusiera todas sus redes en privado, traté de reportar y bloquear a las personas que le estaban haciendo mal, pero eso no era suficiente, tenia a todo el grupo bloqueando y reportando cuantas que tiraban mierda.

Todavía tenía que hablar con Tuli, por lo que le dijo aquella noche, no me va que le ande diciendo esas cosas, sea por el tema que sea, ella no tiene la potestad de decir una puta palabra, no es nadie para meterse en nuestra relación.
Ella ya es mayor de edad, son cuatro años, no diez.
Tome el teléfono y la empecé a llamar, demoro un toque en atender, pero lo hizo.

—Liti, ¿todo bien?

Dijo ella, del otro lado de la línea.

—Tenemos que hablar.

Dije con una voz seria.

—Contame rey.

—¿Que fue lo que le dijiste a Agustina?

Ella tardó en responder, y cuando lo hizo respondió con una voz temblorosa.

—Nada, ¿que te dijo ella?~

—No te hagas la boluda conmigo, porque no me va, Rusher y Tiago me contaron todo, no te metas en nuestra relación, ¿que te importa si es mayor o menor que yo?

—Solo fue un comentario...

—Un comentario muy fuera de lugar, no acotes nada, porque yo no me metí en tu relación con Oky, porque no me meto en donde no me llaman, vos deberías de hacer lo mismo.

Le corte sin dejar que ella siguiera la conversación, me había re sacado de onda, todo piola pero eso de metida no me va.

—Eu, ya bloqueamos y reportamos todas las cuentas.

—Gracias gatos.

Acote guardando mi teléfono en el bolsillo de aquel pantalón de jean negro.

—¿Como está la nena?

Pregunto Tiago.

—Maso, esta destrozada pero mal.

—¿Que le gusta a ella?

—Yo.

El santiagueño río y negó con la cabeza

—Estoy hablando de chocolates y esas boludeces.

—Aaah, Em..., pasa que le gusta todo.

—¿No sabes que le gusta a tu wacha?

Pregunto Tiago Pesca.

—Se si, el café frío, pulseritas que brillan en la oscuridad, caramelos de naranja, chocolatada Uruguaya, sanguches de milanesa, a no para eso me gusta a mi, el helado de chocolate y menta granizada, yo por su puesto, ¡Ay! Ya sé las galletas de su abuela, es lo que ama más en el mundo, después de mi claro.

—Bueno, conseguí la receta de las galletas de su abuela, Thomi vos vas a tener que buscar los caramelos de naranja.

Fmk.