𝐑𝐨𝐥𝐞𝐩𝐥𝐚𝐲 L.

𝑺𝒆𝒕𝒕𝒂𝒏𝒕𝒂𝒅𝒖𝒆

"Feliz de mentira"
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Editado.

Me fui como un cobarde, y regresé siendo uno, ver esa escena fue terrorífica para mi, no por el hecho de saber que Tiago sentía algo por ella, sino porque ella sintiera algo por el, sentía que la perdía, y aunque quiera mostrarme fuerte, solo soy un "niño" asustado.

Veo sus ojos brillosos, cuando nuestras miradas chocan, esos ojos que me dan esperanzas en el amor. Pero veo ese beso y enseguida siento ese disparo al corazón, me encantaría sacar fuerza y manchar mi corazón de sangre, pero no puedo hacerlo, solo quiero congelar el momento en donde la tenia cerca amándome y besándome a mi, para siempre.

Me había detenido un segundo, porque aunque mi ventanilla esté baja, sentía que me faltaba el aire, sentía que moría con tan solo un zumbido, no podía seguir manejando en ese estado, una vez que me recompuse seguí merodeando por las calles de Baires, y llegue a esa pista donde la conocí.

La observe de lejos sentada en el borde de aquella pista de material, su rostro era incomprensible, pero aún así, podía ver la tristeza en sus ojos.
Quería acercarme, pero no sabía si sería la mejor decisión, de repente sentí como esas pequeñas gotas comenzaron a mojar mi cabello, el clima no era el mejor en estos momentos.

Cundo por fin decidí tomar valor para poder acercarme, observé como él llegaba con aquel paraguas negro, lo posicionó sobre a su cabeza, y luego de que ella se rescatara que él estaba ahí, comenzaron a hablar, y a decir verdad, no estuvieron mucho tiempo haciéndolo. Al principio parecían estar en desacuerdo, pero cuando se alinearon volvieron a acercarse para terminar de matarme, una vez más se habían besado, pero esta vez, sin darse cuenta que otra vez los veía.

La lluvia comenzó a ser más intensa, empapando todo mi cuerpo, mi cabello derramaba agua como si estuviese debajo del lluvero, una vez más sentía como mi corazón se encogía, y pedía por favor que terminaran.

Por favor, por favor, ¿Cuanto falta?~

Pedía yo, mientras mis ojos se llenaban de lágrimas, jamás llore por una mina, pero esta no era cualquier mina, era el amor de mi vida. El amor de mi vida con alguien más.

Sin respiración comencé a caerme hacia atrás, que bueno que la camioneta estuvo ahí para atraparme, porque hubiese caído al suelo, y estoy seguro que una vez ahí, no me hubiese levantado jamás.

Te deseo, deseo que vinieras
Te extrañé, te besé e hice creer
Estoy soñando con todas las posibilidades, y en todas las posibilidades muero de amor por vos.

La espere, la espere como el verdadero perro mojado, la ame, la ame como nadie, y obligado, la tengo que dejar ir, porque tristemente, ella dejó de amarme a mi.
Si nadie puede salvarme, que mi único salva vidas seas vos, porque sin tu culo rebotando, no puedo ser yo.

"Solo quiero que me quieras Bebota."