12| Memoria

5.4K 609 239
                                    

"Memoria"
Narrador| Clara

Cubrí mi boca, las ganas de vomitar no se iban desde hace horas. Trague grueso, intentando recolectar las energías que guardaba en mi cuerpo para poder levantarme.

¿Dónde mierda estoy?

—¡Eres una inútil!—una voz gruesa hizo que me estremeciera, y curiosa intenté moverme hasta las rejas de la puerta que bloqueaba mi salida de lo que parecía ser una celda.

—Lo lamento...

—Debiste haber muerto—agregó aquel sujeto, y en cuanto entrecerré mis ojos en un intento de enfocar mi vista, logré ver a Valeria.

Esa traidora...

—No volveré a decepcionarte.

—Más te vale, porque para la siguiente, yo mismo te eliminaré por inservible—ella bajó la mirada, y enseguida, una fuerte bofetada hizo eco desde aquel pasillo hasta mi celda. Abrí mis ojos, llevando ambas manos a mi boca para evitar decir algo—¡responde!

—Entendido, señor.

—Bien, sal de mi vista—aquel hombre hizo un movimiento con su mano antes de seguir avanzando, y ahora mi vista se posó en Valeria, quien dio un profundo respiro antes de empezar a caminar hacia mi dirección.

Fruncí el ceño, esperando a que estuviera lo suficientemente cerca para encararla, pero entonces, un fuerte dolor en el costado de mi abdomen me consumió, y me quejé agudamente, cayendo de rodillas al suelo.

—Se supone que Red debía matarte—una voz conocida me obligó a alzar mi vista para observar a través de los barrotes, y adolorida, cubrí mi herida vendada con una de mis manos.

—Cierra la boca, traidora.

—Clara, hice lo que debía hacer, al igual que todos ustedes—murmuró, y vi su mejilla enrojecida por el anterior golpe—¿acaso seguirán ocultando todo lo que sus noviecitos hicieron?

—¡Cállate!—grité enfurecida, y me exalté en cuanto vi la silueta de aquel asesino aparecer. Valeria lo detuvo, colocando su mano sobre su pecho.

—Tranquilo, estoy bien—dijo, y él asintió ligeramente, siguiendo con su camino—Clara, tú no sabes nada.

—¿Y tú si?

—Más de lo que tú y esos mellizos saben.

—Ninguno de nosotros es un traidor, a diferencia de ti.

—¿Estás segura?—alzó una de sus cejas, y desvié mi mirada frustrada—deberías preguntarle eso a tu alma gemela—me quedé en silencio, no iba a caer en su juego.

Ella quiere que desconfíe de quienes amo, y no haré eso.

—Como sea, toma—lanzó unas llaves, y fruncí las cejas confundida—solo le devuelvo el favor a Blaise, y si sales con vida, dile de mi parte que es un idiota.

—¿Crees que soy una imbécil?—musité, agarrando con desconfianza aquellas llaves en el suelo.

—Confíes o no, es tu única oportunidad de poder salir de este lugar, así que terminarás intentándolo de todas formas—se encogió de hombros, manteniendo su típica expresión de completa seriedad—solo te doy las llaves porque le debo una a Blaise, pero con esto estamos a mano, así que la próxima vez que lo vea, yo misma lo asesinaré.

Reí sarcásticamente, levantándome del suelo algo adolorida.

—No te mientas a ti misma, no serías capaz de matarlo.

Faceless Revenge ©Where stories live. Discover now