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15| Huída

"Huída"
Narrador| Black

No perdí más el tiempo, y aprovechando su momento de debilidad, di una última patada para terminar de sacarlo del auto, cerrando la puerta y encendiéndolo lo más rápido que pude.

No tenía las llaves, y el estrés no me estaba ayudando mucho, pero de todas formas, logré encenderlo por medio de los cables.

Mis manos tomaron del volante, y alterado, conducía hacia el portón por el que vi desaparecer a Clara.

Confiaba en ella y en que su plan daría resultado, pero aún así, me preocupaba el hecho de no saber que mierda está pasando ahí dentro.

Me estacioné justo en frente.

¿Debería esperar o bajarme y buscarlos?

Joder.

Han tardado bastante...

¿Y si pasó algo?

Si, mejor voy a ver.

Me bajé del auto, buscando en mi bolsillo algún cuchillo en caso de que me cruce con alguien. Pasé por debajo de aquel portón, corriendo a través del almacén de armas para llegar hasta la puerta por la que supuse habían entrado.

Mi corazón latía demasiado rápido, pero por alguna extraña razón, no tengo miedo.

¿Estoy nervioso?

Muchísimo.

Pero confío en que estarán bien.

Avancé por el pasillo, intentando ir en dirección a la segunda explosión que había alcanzado a escuchar, y como supuse, logré divisar una pared grisácea algo destruída.

¿No había ningún guardia?

Eso es raro.

Me apronté en llegar, y en cuanto los cuatro entraron en mi campo de visión, corrí hacia ellos.

Clara estaba arrodillada, y nunca la había visto tan desesperada. Y al lado, estaba Blaise, intentando cargar a...

¡Mi escuincla!

—¡Bee!—grité, y la vista de Blaise cayó sobre mi, se apartó dejando que yo pudiese acercarme.

Mis manos temblorosas acariciaron su rostro herido, y nervioso, intenté agitarla suavemente para despertarla.

—No despiertan—Clara sollozó, y estresado me volteé para ver a White.

Por favor, sé fuerte.

—Black, ayuda a tu hermano—Blaise tocó mi hombro y yo reaccioné, inclinándome para lograr besar la frente de Amaya antes de separarme para intentar cargar a White.

Me quejé por lo bajo, no sé qué tan difícil sería salir de aquí, pero espero que Blaise sepa por donde podemos huir.

—¡Deténganse!—me volteé abruptamente al oír el grito de Blaise, viendo a Clara levantar a Amaya en un intento de cargarla—sé que tienen miedo—yo fruncí las cejas, ¿Blaise intentaba convencer a los guardias?—sé que mi padre amenazó a sus familias, y que la mayoría de ustedes desearía nunca haber entrado a una mafia—añadió, haciendo un ademán por su espalda para indicarnos que nos fuéramos.

Le lancé una rápida mirada a Clara para asegurarme de que ella podía cargar a Amaya, y cuando la vi asentir, di un paso hacia el gran hueco en la pared provocado por la anterior explosión.

Dejé que Clara me adelantara, y la poca tranquilidad que tenía dentro por lo despejado que estaba el pasillo, se fue a la mierda cuando empecé a escuchar disparos.