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Daella estaba con Rhaenyra mientras la ayudaba a terminar de arreglar a los pequeños niños que estaban insoportables.

-Te ves increíble, cielo - murmuro la rubia a su prima cuando la vio con su vestido de novia -Eres preciosa, Hela.

-Tu también eres hermosa - murmuro de reojo -El dragón estará feliz de que vuelvas a sus brazos.

-Mi padre presentará a la nueva prometida de Aemond - murmuro Rhaenyra pasando una mano por el brazo de Daella y se alejo cuando sintió la cicatriz.

-Me parece una falta de respeto para Helaena y Jace. Puede anunciar su compromiso en otro momento.

-La mujer que se va a comprometer con Aegon es hermosa, pero dicen que la chica que se comprometerá con Aemond no es muy agradable que digamos. No te preocupes por eso - susurro su prima mirando a su hermana -Te dije que volverás a estar en los brazos del dragón.

—¿ De que hablas?

—Yo sola me entiendo — sonrío y terminó de arreglar su vestido con la ayuda de Rhaenyra.

■♤■

La Fortaleza Roja estaba en el caos. La gente caminaba de aquí para allá para preparar los últimos detalles de la gran boda. Jacearys terminaba de arreglar su vestimenta y dio un respingo cuando Aemond entro con la bata de la vestimenta para la ceremonia Valyria.

—Aquí esta—murmuro sentándose en la cama —¿ Comprendes que te vas a casar con mi hermana ? Si  Helaena llega a derramar una lágrima por tu culpa, te sacaré un ojo.

—Prometo hacerla feliz — el pelinegro sonrío —Te digo lo mismo por Daella.

—Yo no voy a casarme y ella no es tu hermana.

—Es mi amiga y no dejaré que la lastimes.

—Mhmm.

■♤■

Helaena venía del brazo del rey mientras la gente la miraba. Daella estaba en el altar junto a su amigo y sus tíos. El rey llegó al altar y dejó un beso en la mejilla de su hija para entregarla a su nieto.

La ceremonia comenzó en Alto Valiryo y ambos realizaron el ritual cortando la palma de sus manos y sus labios.

—Yo soy tuyo y tu eres mía — murmuro el principe mirando a su esposa.

—Yo soy tuya y tu eres mio —completo la mujer.

—Bajo las leyes de la antigua Valyria y la Bendición de los siete, yo los declaró, marido y mujer — el hombre miró al pelinegro —Puedes besar a la novia.

Jacearys beso la frente de Helaena y luego unió sus labios en un beso lleno de pasión, pero tierno a la vez. La gente aplaudía mientras la familia celebraba la unión de una nueva pareja.

Daella estaba más que orgullosa por la unión que se había realizado. Jace y Hela merecían ser felices.

—Se que la hará muy feliz. Aunque ya lo amenaze.

Daella giro su cuello y miró a Aemond con dos copas en la mano.

—¿ Desde cuando bebes ?

—La ocasión lo amerita — susurro y le tendió la otra copa —Estás más hermosa que nunca.

— Gracias, 'Emond — murmuro dejando un beso en su mejilla.

Daella tomó un sorbo de la copa y se dispuso a observar a los presentes. Una gran sonrisa se planto en sus labios cuando vio a cierto pelinegro de ojos grises. Cregan Stark venía entrando al gran salón y a su lado una hermosa mujer de cabellos negros. Probablemente sería su esposa.

SANGRE DEL DRAGON ( Aemond Targaryen )Where stories live. Discover now