SANGRE DEL DRAGON ( Aemond Targaryen )

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Los preparativos para el onomástico de Alyssa y Daeron habían empezado y todo el mundo quería opinar de aquello. Aemond y Daella asentían a todo porque no sabían como decir que también era el onomástico del pequeño Aelix.

—Tengo un conflicto —Daemon entro al salón —Y quiero que mi hija y su esposo me lo explíquen.

—No me molestes —la rubia rodo los ojos.

—¿ Quiero saber porque hay un niño que es una extraña combinación entre Aemond y yo? Es aterrador lo mucho que se parece a él, pero también se parece a ti —suspiro —Quiero una explicación.

—¿ Recuerdas que tuve un embarazo del cual nadie supo más que su padre? —asintió —Bueno Aelix es la sorpresa y Alyssa el regalo que vino con la sorpresa. No hay más nada que explicar, son mellizos y por cierto —miro a los presentes —El también cumple años en tres días.

Se concentro en su plato de fresas y Daemon la miro perplejo.

—El descaro en persona —Rhaenyra lo golpeó —Y él esposo también.

—Mira quien habla —Baela alzó una ceja —Es algo que viene de ti mismo, no puedes culparnos.

—Punto para Baela —Rhaenyra se burlo.

—Eso es mentira, Rhaena no es así.

—Como se nota que... —Rhaena le dio un codazo a Lucerys y este sonrío.

—¿ Qué cosa? —Daemon lo miro con el ceño fruncido.

—Nada, nada —levantó las manos en señal de paz.

—Papá, ¿ Por qué no aceptas que jamás podrás ganar una discusión con ellas ?—Jacearys lo miro con una sonrisa.

—Soy Daemon Targaryen, guerrero más temido de Poniente. ¿ Y tú esperas que me dejes ganar por ellas en algo absurdo?

—¿ Por qué no les dices que ganaste la guerra de los peldaños de piedra con mis flores? —Daella se burlo.

—Ya estoy grande para pelear con ustedes —se sento en una de las sillas y se dispuso a ayudar a Rhaenyra como excusa.

—Ya estas viejo, querrás decir —Baela se burlo y todos se echaron a reír.

Helaena entro al salón con los infantes, pero toda la atención se la llevo ella. Estaba preciosa con un vestido gris ceñido al cuerpo y un gran escote.

—Pensándolo bien, no necesito ser hombre —Daella miro a Daeron subiendo y bajando las cejas —Hel, te ves divina.

—Gracias, Ela, tu también te ves hermosa.

—Helaena, estoy usando la ropa de tu hermano. Te dije que aprendieras a ser una mejor mentirosa.

—Pero yo te veo bien —Aegon frunció el ceño —Solo que embarazada.

—Se ve bien así le pongas una bolsa de patatas como ropa —Baela rodo los ojos.

—No puede ser, por primera vez estoy de acuerdo con Baela, un milagro —Aemond dejo un beso en la cien de Daella.

—Idiota —susurro la morena.

—Idiota —Gaemon repitió.

—Gaemon, deja de repetir lo que dice Baela, te convertirás en ella —Aegon lo regaño y el niño asintió.

Alyssa comenzó a llorar y Rhaenyra se volteo de inmediato.

—Viserys, ¿ Qué le hiciste? —se acerco a ellos.

—Nada, nada. Lo juro —dijo con miedo.

—Esta llorando porque se sento sobre uno de sus dragones y lo rompió sin querer —Aelix miro a su tía con una sonrisa —No te preocupes hermanita, yo lo arreglaré.