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Haileen Steinfeld como Jayah Green
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Aidan Guillen como Aberama Gold
Escuchaba los quejidos del hombre detrás de mi, el sonido del martillo contra su carne, los suspiros rabiosos de Aberama y el gritó de dolor escapar de su garganta. Sabía que le dolía, le dolía el disparo en su hombro y le dolía la muerte de su hijo.
Bonnie, cuanto te necesito.
— Maldito bastardo. — mascullo. — Jayah, ayúdame a subirlo al automóvil.
Camine hacia Gold, Johnny Dogs escupía sangre en el suelo sin poder mantenerse en pie. Lo levante con dificultad junto a Aberama y entre ambos lo arrastramos a la parte trasera del automóvil.
— Te juro que yo no fui. — exclamó con dolor Johnny.
— Cierra tu puta boca. — ordenó Gold. — Iremos a ver a Tommy. — me dijo con la mirada perdida en el camino.
Apoye mi cabeza contra el vidrio de la ventanilla, podía sentir el frío recorrerme el cuerpo, la tibieza de la tela del abrigo de Bonnie aún sobre mi cuerpo, los sonidos del motor a medida que aumenta a la velocidad.
Nos detuvimos frente a una enorme casa, ya había estado aquí antes con Bonnie, cuando arreglaban las peleas. Abrí la puerta de atrás del automóvil empujando el cuerpo herido de Johnny al suelo, él gritó de dolor llamando a su amigo, su líder, al culpable de todo lo malo que me estaba sucediendo.
Thomas Shelby salió con rapidez de aquella enorme casa con una ametralladora e sus manos apuntando en nuestra dirección.
— ¡Sal del maldito auto! — exclamó. — ¡Sal del maldito auto ahora o abriré fuego!
Aberama abrió la puerta con torpeza y yo hice lo mismo, baje con lentitud observando a mi alrededor mientras Gold le daba la vuelta al automóvil señalando hacia Johnny Dogs como el traidor. Thomas bajo el arma, observando incrédulo aquella escena frente a sus ojos.
