12

1.4K 175 24
                                    

ALISON

Suena el timbre de la puerta exterior. Magan va a abrir mientras yo estoy haciendo limpieza. Era sábado.

—Hola, está Alison.

Paré de de limpiar al oír la voz que electrificaba mi interior, mi loba me decía que era el que ella quería. Me pedía siempre que lo tenía cerca que fuera a por su lobo y lo abordara.

—Sí pasa —le dijo Megan—. Perdón por el desastre, estamos de limpieza.

—No importa, solo será un momento.

Yoongi entró con las manos metidas en los bolsillos de su traje caro y de corte recto. Guapo se quedaba corto.

—Alison, hola —se me quedó mirando.

—Hola Yoongi —me quité el pañuelo que me había puesto en la cabeza y me acerqué a él. Me dió un beso en la mejilla que yo dejé que hiciera sin poner objeción.

Su olor me volvía imbécil. Odiaba eso.

—Tenemos que ir al doctor.

—¿Al doctor?

—Sí, al que tenemos en mi manada. Desde que estás en transformación no te ha visto ninguno y necesitas saber qué tal va todo. No quiero que tengas problemas después.

—Yoongi yo...no puede verme nadie de los nuestros, tengo... —¿Cómo se lo decía?—. Tengo los agujeros de los colmillos de....

—Lo sé —se puso serio—. Es un amigo, no te preocupes.

Megan me miró desde atrás y movió su cabeza.

—Díselo.

Yoongi la miró extrañado.

—¿Decirme que? —después me miró a mí—. ¿Qué es? ¿Que te ocurre?

—Me está saliendo algo extraño alrededor —y además no me sentía bien. Estaba muy cansada.

—¿Desde cuándo? —se veía molesto e intranquilo. Sus ojos se volvieron oscuros, eso dejaba claro el alfa que era. Mi Alfa...por dios, tenía que acostumbrarme a eso y no podía aunque lo intentaba.

Vino a ponerse más cerca, mi loba quería que lo abrazara y me apoyara en él para que me mimara y me comprendiera.

—¿Qué es? Dímelo, no tengas miedo —me acarició la mejilla—. Yo te ayudaré.

Estaba derrotada, sin Jungkook era la única persona en la que podía confiar.

—Ven —cogí su mano y se la agarré con fuerza—. Megan iremos a mi habitación.

—De acuerdo, yo tengo que salir a por unas cosas, vuelvo pronto.

—Vale.

Llevé a Yoongi por el pasillo y sentía sus pasos detrás de mí. Entramos y cerré la puerta.

Nos quedamos uno frente al otro.

—Estoy desesperado Alison, verte me hace sentir tantas cosas y no poder tenerte como quiero es un suplicio —me dijo con su voz fuerte.

—¿Te lo estoy haciendo difícil verdad?

—Sí muy difícil, y es que te deseo, mi condición de Alfa me pide que te eche en esa cama en éste momento y te desnude a tirones. Pero no voy a hacerlo porque no quiero hacerte presión con ello.

—Gracias, eres un buen hombre —se merecía que se lo dijera. Nunca creí que Yoongi fuera todo un caballero, su aspecto seco me había engañado.

—Pero no sé lo que aguantaré Alison, date prisa en encontrar el camino para venir a mí, estoy desesperado —se veía, no tenía que decirlo. Me sentía culpable.

MI MATE ES UN VAMPIRO (Saga VAMPIRE JUNGKOOK) BELIELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora