MI MATE ES UN VAMPIRO (Saga VAMPIRE JUNGKOOK) BELIEL

15

ALISON

—¡Megan!

—No hagas un drama que estoy bien y te conozco, parece como si me estuviera muriendo.

Verla con la cabeza vendada y con el labio reventado no era muy fácil de asimilar. Para mí era tan especial que daría mi vida por ella y no podria vivir si le ocurriese algo.

Llegué hasta ella y le besé la mejilla. La miré con ternura.

—¿Pero que ocurrió? ¿Quién te hizo esto?

—Un tipo muy fuerte que me abordó nada más salir yo del trabajo. El hijo de puta me cogió de los pelos y... —se estremeció y cerró los ojos.

—Vale, suficiente, ya me lo contarás cuando estés mejor —le cogí la mano—. Megan te quiero, lo he pasado muy mal cuando Jungkook me lo dijo.

—¿Jungkook? ¿Ha venido? Alison ten cuidado no quiero volver a verte como éste último tiempo, has estado muy mal por su culpa —me habló triste.

—No te preocupes, no pienso dejarlo estar cerca, ya no Megan, se acabó ya te lo dije, quiero vivir tranquila y sin preocupaciones.

—Me alegro que estés a mi lado Alison, sabes que no tengo familia y después de que mi novio me engañara con la asquerosa esa, solo te tengo a tí. No quiero que te ocurra nada —se le saltaron las lagrimas mientras me hablaba.

—Madre mía, si parece que soy yo la que está enferma, dejame que te mime y deja de hacerlo tú conmigo —dije con falso enfado.

—Te quiero Alison.

—Yo también te quiero Megan.

Me abracé a ella despacio y sin hacer presión. Seguro que su cuerpo también estaba dañado.

¿Quién le haría una cosa así? Aquí no conocíamos a nadie, no teníamos enemigos.

—¿Puedo pasar?

En la puerta estaba Yoongi con una leve sonrisa.

—¡Oh! Claro —fui hasta él y me cogí a su brazo—. ¿Cómo te has enterado? No me dio tiempo de llamarte.

Me subió el imbécil de Jungkook tan rápido a la moto que no pude llamarlo. Aún estaba enfadada por eso, ¿Porqué siempre me trataba como si fuera una niña pequeña? No podía soportarlo.

—Vi cómo venías hacia aquí y con quién —se quedó esperando algo, tal vez mi explicación. Sus facciones se volvieron duras.

Yo abrí los ojos y la boca esperando que mi mente me dijera como contar algo tan absurdo y que sabía que lo estaba molestando. ¿Qué hombre le gusta ver a su pareja con su antiguo amor? Estaba metida en un buen lío porque Jungkook no sabía estar lejos del todo.

—Quiero agua Alison —Megan me llamó. Para eso están las amigas, comprendí que quería ayudarme porque sabía de qué iba todo aquello. Se lo agradecía.

Fui hasta ella de nuevo y cogí un vaso que había en la mesita. La incorporé un poco y la ayudé a beber, ella me guiñó el ojo.

—Espero que no sea grave Megan —le dijo Yoongi cuando llegó a nuestro lado.

—Soy fuerte señor Min, bicho malo nunca muere —sonrió.

Estuvimos un rato charlando de otras cosas, no quería hablar aún de lo sucedido, le dolía, podía verlo.

—Voy a quedarme con ella Yoongi —le dije cuando ordenaba su ropa en el pequeño armario que estaba en la habitación.

Se había quedado dormida por la medicación que le habían puesto.