MI MATE ES UN VAMPIRO (Saga VAMPIRE JUNGKOOK) BELIEL

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ALISON

—Hola soy Alison, me consta que ésto que os digo no es nuevo para vosotros pero necesitaba subirme aquí para hablar y dejar claras las cosas —me encontraba donde siempre había visto a Tae desde que llegué con sus predicaciones—. Lo que se nos viene es difícil de explicar pero intentaré que nos hagan el menos daño posible en la batalla.

Tenía miedo, pero no podían saberlo.

Mi conducta asustadiza e infantil tenía que desaparecer si quería llegar a ser quién era. Nada más y nada menos que su Alfa. Se me contrajo el estómago y me puse a pensar en positivo. Era como dar una ponencia a mis subordinados, o los chicos en prácticas que venían a aprender a ser forenses.

—Tendremos que lidiar con una batalla como os he dicho, será contra los híbridos. Seres parecidos a nosotros, pero que llevan la mitad de un vampiro —que tontería, eso ya lo sabían, la única que se había enterado hace poco era yo.

Entonces se me aceleró el corazón al pensar que lo vería. Jungkook era uno de ellos, ¿Porqué todo tenía que tornarse de nuevo oscuro y en un camino sin salida? 

Aún resonaban sus palabras en mi mente. Luché por no contestar, me fue difícil pero lo conseguí.

Había contactado conmigo horas antes.

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"Alison, escúchame. Solo estoy por un momento alejado de tí, sé que no entiendes mi comportamiento cuando lo que te prometí es que estaríamos juntos cada vez que los dos lo decidiéramos."

Al menos lo reconocía, que me lo había prometido. Yo puse mi mente en blanco intentando no escucharlo. Pero fue inútil.

"¿No vas a contestarme? ¿Estás enfadada conmigo? Venga Alison, dime algo.

Me mordía las uñas y andaba de un lado a otro del bosque como una posesa.

Quería decirle tantas y tantas cosas que no pude, éramos distintos y además estaba ligado a los que querían hacerme daño.

"¿Quieres pelear? ¿Lo has decidido al final? ¿Eso es lo que te ocurre y por eso no dices nada?...Pues antes me pudro en el infierno que hacerte daño, eso que lo tengas por seguro"

Mi llanto era ahogado, no emitía sonido pero las lágrimas bañaban mi rostro.

¡Mentiroso! Me había mentido, no me abrazó ni me besó cuando me vio.

"Cuando nos veamos seremos enemigos solo si tú así lo decides. Pero no creas que lucharé contigo, te dejaré que decidas si quieres acabar conmigo. No voy a defenderme."

Mi mente estuvo a punto de contestarle, pero no pude emitir ningún pensamiento.

"Te diré algo: Cuando se tiene fecha de caducidad las cosas son más hermosas y el amor algo único, y por él, desaparecería al fin de mi existencia sin remordimiento alguno"
"Adiós mi mate Alison."

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—La supremacía es la que mueve todo, todos los clanes quieren el poder a toda costa —me miraban todos atentos. Y mi interior y mi corazón explotaba por recordar sus últimas palabras.

—¿Quién más que tú va a liderar la batalla? —me preguntó un hombre robusto que se levantó para mirarme como si yo no fuera lo bastante fuerte para hacerlo.

—Seremos...

—¡Siéntate Tae!

Taehyung se había levantado para contestar y giró para mirarme, su actitud me decía que no le había gustado que lo tratara así.

—Yo puedo sola, gracias —sentencié.

—Solo quería ayudarte —se explicó entre dientes.

—Ya lo harás mañana, no te preocupes —nos miramos en silencio.

Se sentó con un humor de perros, o de lobo cabreado como se dijera.

—El Alfa Min Yoongi nos ayudará fusionando su manada a la nuestra —los miré a todos erguida y aquel hombre se sentó, al fin respiré—. Kim Taehyung —lo señalé— también estará liderando a mi lado, él es una pieza importante del puzzle y lo sabéis.

Se calmó, lo vi ceder. Pero sin dejar enfriar la cosa seguí diciendo:

—Bajo mis órdenes por supuesto —ésta vez ni lo miré, mejor no quería seguir viendo su nuevo enfado que habría vuelto.

—¿Quién se supone que es tu mate? —me sorprendió lo que dijeron y recorrí el lugar buscando quién había lanzado esa pregunta. Se trataba de un hombre bastante alto y con una sonrisa idiota en su rostro, me di cuenta que ser lobo no dejaba atrás el ser imbécil. Me miró desafiante.

—¿Importa eso? —la pregunta me pareció tan machista que no pude dejarla pasar sin más. ¿Sin parte masculina no era lo mismo acaso? Vaya tontería para gente que vivía entre dos mundos.

—Pues si importa, porque siempre que yo recuerde, ha estado al frente un macho Alfa, no una hembra. Y ahora tenemos una que encima está sola.

Apreté las manos al atril que tenía delante y se me erizó la piel. Sentí ganas de hacerlo entender como se merecían los tipos como él.

Miré por un momento a Tae y sonreía, leí en sus labios "Todo tuyo"

Me encendí y la sangre recorrió mi interior a toda velocidad. En todo lo relacionado con seres irreales sería una novata, pero poniendo a raya a tipos como ese era una total experta.

Rodeé el atril y empecé a bajar despacio las escaleras. Todo el mundo me observaba.

—Mi nombre es Alison, mi padre era el Alfa de ésta manada, cuando lo mataron, mi madre su mate, me llevó a un lugar donde nadie me conociera —iba andando por el pasillo y todo lo que en realidad había sido mi vida me vino más nítido que nunca—. Un maldito vampiro le arrebató la vida y otro como ese cuidó de que nadie me hiciera daño jamás —ya estaba muy cerca de ese cerdo, me miraba un poco más serio que antes—. Ese vampiro está en el lugar donde yo tengo que infligir la ley de mi manada para que seamos los que vivamos y no los que muramos. Tengo que estar en su contra para que tipos como tú se sientan libres aunque yo esté encarcelada en algo que me va a traer el peor dolor —me pegué a él y tragó, sabía que no podía hacerle nada a la primera de su clan, después de todo no era tonto—. Tendré que dejar atrás mis sentimientos y al que siempre consideraré mi mate. Así que si no te gusta estar aquí en ésta manada vete, porque la liderará una Alfa te guste a tí o no.

Me sentí poderosa, estaba también dolida porque había dejado claro que el que siempre sería mi mate tenía en su interior una parte de vampiro, un cóctel que en éste mundo al que pertenecía, no estaba bien visto...