Capítulo 11.

7.4K 971 141
                                    

First Light - Denton Thrift ♪

♪ First Light - Denton Thrift ♪

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Capítulo 11.

Un gemido se escapó de mis labios cuando Adrián comenzó a moverse lentamente, permitiendo que mi ano se amoldara al grosor dotado de su miembro. Luego mordió uno de mis hombros, gruñendo de placer con sumo descaro.

—Dóblate más para papi —me ordenó con la voz entrecortada, palmeando una de mis nalgas con fuerza.

Cuando hice lo que me ordenó, no dudó en tirar de mi cabello mojado para penetrarme con más rudeza, moviendo sus caderas con agilidad y abrumándome de placer entre cada embestida.

—Coño, Aly —gruñó al presionar sus dedos contra mis caderas.

—¡Sigue, sigue! —le pedí con desesperación, hiperventilando como una fiera en celo—. ¡Andy, sí!

—Cierra la boca, lengua viperina —metió varios dedos en mi boca y continuó embistiéndome con rudeza, sintiendo cómo su húmedo miembro resbalaba en mi ano al entrar y salir sin piedad.

El cosquilleo en mi vientre incrementaba cada vez más. La piel de mi cuerpo se erizaba, combinándose con el placer que estaba sintiendo al ser poseída de forma anal por el hombre que no dejaba de gruñir y jadear con descaro.

—¿Esto te gusta? —tiró de mi cabello, haciendo que lo mirara a los ojos desde mi posición mientras continuaba penetrando mi ano con determinación.

Asentí.

—¿Qué? —insistió al volver a tirar de mi cabello.

—S-Sí, papi —gemí, abrumada por la oleada de placer que sentía.

—Así me gusta oírte, rendida por mí —sujetó mi quijada con brusquedad y me besó frenéticamente mientras su lengua jugaba con la mía—. ¿Quieres que me venga en tu culo? —preguntó desesperado, disfrutando de las penetraciones que me brindaba—. Respóndeme, coño —me dio una palmada en la mejilla y volvió a sujetar mi quijada al no responderle de inmediato.

—¡Sí, sí! —gemí desesperada.

—Buena niña —presionó su nariz contra la mía, penetrándome con más rapidez, jadeando desesperado.

Podía reconocer que estaba a punto de experimentar un orgasmo anal, ya que no era la primera vez que me sucedía. Sin embargo, Adrián no pensaba detenerse. Al contrario de eso, dirigió una de sus manos hacia mi vagina y comenzó a frotar mi clítoris una y otra vez, causando que una espiral de placer y cosquilleo incrementara, apoderándose de todo mi cuerpo.

MCP | La Especialidad ©️Where stories live. Discover now