Cap 12- Un adiós necesario.

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Un elegante carruaje entró a toda prisa a la mansión de Otabek Altin de donde bajaron a Yuuri Katsuki que fue cuidadosamente llevado en andas a su habitación por un par de lacayos ya que a raíz del fuerte golpe propinado por Iván Kuznetsov perdió el conocimiento por lo que sus amigos llamaron de inmediato al doctor Petrovich que arribó enseguida acompañado de su ayudante.

--¿Donde está el paciente?.-- preguntó el facultativo.

--En su recámara, venga conmigo.-- contestó Beka.

Subieron rápidamente al segundo piso para entrar a una opulenta alcoba donde sobre una amplia cama Yuuri seguía inmóvil.-- Hay que quitarle la ropa que pueda apretarle.-- indicó el médico.

Al instante le fue retirada la chaqueta, la corbata, el cinturón y las botas.-- ¿Cree que sea grave?.-- preguntó el kazajo con preocupación.

--Eso lo determinaré ahora.-- el médico examinó con cuidado las pupilas del nipón asi como su pulso y sus demás signos vitales.-- Me parece que no es nada grave, sus signos vitales son normales, de hecho ya está reaccionando.-- añadió cuando Yuuri movió levemente la cabeza huyendo de la luz de la lámpara.

--¡Gracias al cielo!.-- exclamó Beka con alivio.

--Por ahora vaya a descansar, creo que tardará un poco en reaccionar por completo por lo que me quedaré aquí hasta mañana si me lo permite.--

--Gracias doctor pero yo también me quedaré a su lado.-- Beka enseguida se sentó sobre un sillón, estaba angustiado pero sorprendido a la vez, ¿cómo era posible que Yuuri se hubiese involucrado en una riña tan vulgar? esto definitivamente no le cabía en la cabeza.

Después de casi una hora Yuuri al fin despertó por completo, se veía aturdido y adolorido pero nada indicaba que existiera algo más grave.--¿Cómo se siente?.-- preguntó el médico.

--Me duele la cabeza y siento que la cama da vueltas.-- contestó en voz baja.

--Lo entiendo, pero le aseguro que dentro de poco se recuperará, por ahora ordenaré que le traigan un poco de té caliente que le ayudará a entrar en calor ya que su pulso y su temperatura esta ligeramente baja.--

Cuando el médico salió Beka se sentó a un lado de la cama, su preocupación había disminuido pero no desaparecido.-- Me alegra que hayas despertado pronto.--

Yuuri no respondió al instante.-- Dime, ¿toda la gente que estaba en el baile se enteró?.-- preguntó al fin.

--Por supuesto, incluso la orquesta se detuvo unos minutos.--

--¿Me viste pelear?.--

--No, un nieto de Madame Egarov fue quien le aviso a Alionna y ella me dijo a mi.--

--¿Y qué pasó después?.--

--Salimos a toda prisa pero ya te encontramos sin sentido rodeado de los demás invitados.--

--¿Y...Viktor Nikiforov estaba ahí?.--

--¿El joven Feltsman?, oh no, seguramente se fue con ese tipo Kuznetsov que huyó al instante apenas tuvo oportunidad.--

--Ya veo.-- contestó pensativo.

Beka vio directo al rostro de su amigo que con la mirada clavada en el techo parecía ausente.-- Yuuri, sé que no es el momento pero necesito saber cuál fue el motivo de su pelea, una anciana decía que tú te estabas burlando de él por ser sólo un soldado, la verdad eso no lo creo, debió haber otra causa de mayor peso.--

--Si la hubo.--

Beka abrió los ojos con sorpresa.-- ¿Puedo saberla? ¿acaso está relacionada a Viktor Nikiforov?.-- se aventuró a preguntar.

Mi dulce omegaTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon