I'm Not Fine At All/ L.S [Traducción]

Capítulo 45

Zayn y Calum lograron arrastrar a Liam de regreso al interior y lo empujaron hacia una silla, asegurándose de vigilarlo en caso de que intentara lastimarse nuevamente.

Niall se acurrucó en el suelo frente a las piernas de Liam, con la cabeza apoyada en las rodillas del chico mayor mientras comía una bolsa de Maltesers. Liam no se movió por mucho tiempo, al menos varias horas pero nadie contaba, y mientras miraba fijamente a la pared, Michael llegó con su mochila, junto con algunas cosas que Niall le había pedido que recogiera del apartamento de Liam y Harry. Les dio un abrazo a todos los chicos, pasó un rato más mientras abrazaba fuerte a Niall, y luego se sentó en el suelo junto al rubio para continuar el juego de espera.

Alrededor de las cuatro, la doctora volvió a la sala de espera, esta vez con la sombra de una sonrisa en el rostro. Liam pareció despertar de su estado de shock y caminó hacia la mujer, con las manos en los bolsillos mientras la miraba con sus tristes ojos de cachorro.

"Buenas noticias." Dijo, dirigiéndose a todo el grupo. "Su hermano salió de la cirugía y ahora se está recuperando en una habitación de la UCI. Todavía está inconsciente y probablemente lo estará por un tiempo, pero ahora pueden visitarlo uno a la vez". Liam jadeó y antes de siquiera pensar en ello, estaba abrazando a la doctora con fuerza.

"Muchas gracias, doctora, gracias". Se apartó y se secó las lágrimas de las mejillas, su corazón se aceleró ante la noticia.

"No me agradezcas todavía. Aun le queda un largo camino por recorrer antes de estar bien. Vamos, déjame mostrarte su habitación".

Liam dejó que la doctora le pusiera una mano en la espalda y ella lo condujo por un pasillo esterilizado. Se detuvieron frente a una puerta que decía 'Paciente con lesión en la cabeza: mantenga el volumen bajo' y el médico la abrió, revelando una habitación blanca y brillante llena de máquinas que emiten pitidos y muebles de mal gusto.

"Estaré afuera si necesitas algo", le dijo la doctora a Liam en voz baja antes de salir de la habitación, cerrando la puerta silenciosamente detrás de ella. Liam asintió y se giró, mirando la gran cama en medio de la habitación por primera vez. Se acercó un poco más, esperando encontrar a su Harry tirado allí, pero no era su Harry.

La persona que yacía en la cama era pequeña y de aspecto frágil. Su piel era gris y prácticamente traslúcida, sus labios eran azules y tenía un gran vendaje alrededor de su cabeza. Liam se dio cuenta de que sus hermosos mechones habían sido afeitados. Un sollozo surgió de su boca y se desplomó en una silla al lado de la cama, su mano alcanzando inseguramente la del menor. Otro gemido escapó de sus labios cuando vio el anillo de compromiso de su madre en su dedo, casi cayéndose por lo suelto que estaba.

"Oh, Haz. Por favor, necesito que sigas con vida. Espera, por favor. Te necesito. Louis te necesita. Todos te necesitamos. Por favor, Harry, eres el pegamento que nos mantiene a todos juntos. No puedo seguir sin ti. Por favor," susurró Liam, sosteniendo la mano aparentemente quebradiza de Harry hasta sus labios para besarla. Mantuvo su mano allí, presionada contra sus labios mientras intentaba devolverle la vida al chico en la cama.

La calidez de sus labios contrarrestó la frialdad de la mano de Harry y Liam quiso llorar cuando sintió el débil pulso de Harry contra su muñeca.

"Harry", gimió mientras comenzaba a sollozar por centésima vez ese día. Nadie sabía cómo le quedaban lágrimas, pero su cuerpo poco a poco se estaba debilitando por el agotamiento. Sintió sus párpados caer mientras miraba adormilado al chico, sus lágrimas deslizándose por su rostro y aterrizando en la mano de Harry, que todavía estaba presionada contra su boca.

Liam se sentó con el durante casi tres horas seguidas, perdiendo el conocimiento, pero sin quedarse dormido del todo. No podía, no cuando cualquier cosa podría pasarle a Harry en cualquier momento. Necesitaba permanecer despierto, alerta por si surgía algo nuevo. Su atención se desvió del chico cuando se escuchó un golpe en la puerta.