❅ 33. Una y otra vez

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Capítulo 33.

Jay sabía que lo que había comenzado a florecer entre ellos, definitivamente no duraría para siempre

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Jay sabía que lo que había comenzado a florecer entre ellos, definitivamente no duraría para siempre. Ilanis tal vez sentía y pensaba que él era la persona indicada, pero muy en el fondo de su cabeza, sabía perfectamente que no había un buen futuro para ambos; y eso le dolía por el simple hecho de que Park Jongseong siempre sería la mejor persona que ha conocido, el chico más lindo y atento... El que se preocupa por ella, y no por lo que las personas dirían.

Ese mismo que la quiere por quién realmente es.

Era casi media noche cuando la chica cerró la puerta de su habitación y se escabulló por los pasillos del edificio hasta la puerta trasera de emergencia. Jay había insistido en esperarla en la calle principal, pues realmente no le gustaba la idea de que se expusiera a salir y caminar sola por ese callejón, pero solo bastó un par de minutos para que bajara de su auto y abriera la puerta, dejándole subir. Ilanis frotó sus manos, tratando de calentarlas, el clima comenzaba a cambiar anunciando la llegada de una nueva estación y no sabía exactamente lo que eso le hacía sentir. Parecía que hubiese sido ayer el día que llegó a Seúl. Jay puso en marcha el auto, mientras la chica se recargaba en el asiento y se dedicaba a observar a través de la ventanilla.

Tenían la ciudad para ellos mismos esa noche, conducían sin ningún destino en mente pero con él extraño anhelo de estar juntos. Tenían que hablar, necesitaban hacerlo... Pero las palabras simplemente se escapaban y permanecían de la misma manera, una y otra vez. La música estaba más alta que cualquier otro día esa noche, What a feeling sonaba un poco nostálgica, o tal vez se debía a la expresión pensativa de Jay y la preocupación que invadía a Ilanis. La chica tomó su mano, entrelazando sus dedos y observando su perfil, con cierta admiración; lo adoraba.

Lo adoraba... Pero él jamás le pertenecería.

—No quiero regresar esta noche —fue lo único que dijo, causando que el chico a su lado desviara su mirada fija de la carretera, para observarla a ella rápidamente—. Llévame lejos, Jay... Solo esta noche, por favor. Llévame contigo.

Tal vez pasaron un par de horas hasta que llegaron a la casa vacacional de los padres del chico. La última vez que Jay había estado ahí, su mejor amigo aún estaba vivo. Estar ahí le traía buenos y malos recuerdos, aún así, el fuego de la chimenea les brindó calor en esa fría noche. Se recostaron juntos en el sofá, abrazados, como si nada pudiese separarlos en ese momento... Cuando en realidad, probablemente sería la última vez que estuvieran juntos, al menos de esa manera.

No habían planeado que algo sucediera, en realidad, ni siquiera habían hablado sobre el hecho de estar juntos alguna vez. Pero cuando las manos de Jay comenzaron a recorrer su cuerpo, cuando sus labios atacaban su boca y el deseo comenzó a crecer en el ambiente, sabían que no habría vuelta atrás. Ilanis se deshizo de su blusa y ayudó a Jay a imitar su acción, el calor de sus cuerpos y la manera en la que encajaban era prácticamente perfecta. Ese momento era perfecto.

𝐂𝐎𝐍𝐒𝐄𝐐𝐔𝐄𝐍𝐂𝐄𝐒 | Park Sunghoon ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora