26 • Discovery

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Cuatro horas atrás...

— ¡ZORRA! ¡DESGRACIADA! — la socia secundaria faltó nada más descabellarse en uno de los pasillos más solitarios de la agencia. — ¡VOY A ACABAR CON ELLA! — pataleó furiosa, golpeando una y otra vez la pared con las manos abiertas.

Dinah se quedó callada, consolando en silencio a Alexa junto a Lucy. Era demasiado divertido tener que presenciar aquel espectáculo de lamentaciones en vivo. Tan divertido que estuvo a punto de grabar la escena para enseñársela a Camila al final de la noche.

— Esas dos desgraciadas... — gruñó entre dientes. — ... ¿Y Keana? — Su risa nasal era derrotada e irónica a la vez. — Esa mujer es más débil y tonta de lo que podría imaginar. Pequeña. Demasiado pequeña e inútil para estar trabajando aquí con nosotras... — Se rodeó las sienes con las yemas de los dedos. — ¿Y esa golfa oportunista? — Apretó el labio inferior, moviendo la cabeza como si estuviera indignada. — Oh, sí que se cree modelo, ¿no? — miró a sus colegas con una mano en el busto. — ¡Cree que con su "talla" periférica podrá alcanzar algo en la industria de la moda! — soltó una carcajada sarcástica.

La mano de Dinah estuvo a punto de cobrar vida propia y golpearla en la cara a la socia secundaria. Llevaba exactamente quince minutos conteniéndose para no decir ni hacer nada que echara por tierra su disfraz y, consecuentemente, el plan de Lauren.

— Maldita zorra... — el pecho le subía y bajaba, furiosa por la petulancia de la que había sido testigo. — ¡Ella no es nada comparada conmigo! ¡Nada!

Compararse con Camila era uno de los mayores refugios que Alexa había encontrado en las últimas semanas.

Era algo que la mantenía segura, pues recordaba que era la única mujer a la que Lauren había amado a punto de pedirle que se casara con ella y eso, en su íntimo, era una enorme ventaja sobre la modelo latina o cualquier otra mujer con la que Jauregui pudiera pasar una noche.

Alexa nunca aceptó el fin de su relación. Controversialmente, tampoco se disculpó ni asumió la culpa, ya que siempre había pensado que, un día u otro, Lauren se daría cuenta de que, aunque Alexa había cometido errores y seguía teniendo algunos defectos, la socia secundaria era lo mejor que tenía, y que de esta manera, se merecían.

En el fondo, siempre había pensado que el divorcio no duraría más de un mes. Pero lo que vio durante las tres semanas siguientes fue a una Lauren distinta de aquella con la que se había casado.

De la mujer reservada y romántica que le gustaba ser, la magnate pasó a ser alguien poco comprometida con las relaciones y poco sensible a lo que sus actitudes provocaban en las mujeres con las que se acostaba, las cuales no tenían intención de pasar solo una noche con ella.

En las tres primeras semanas que la empresaria estuvo soltera, tres modelos diferentes fueron contratadas y despedidas respectivamente. No es que fueran poco profesionales como para conservar sus empleos, sino que las tres se habían convertido en el ligue de la ojiverde. Alexa no podía quedarse de brazos cruzados ante semejante bajeza, así que no dudó en tomar las medidas necesarias cada vez que encontraba un blanco, o debería decir obstáculo, que intentaba acercarse románticamente de algo que ella consideraba solo suyo.

— ¿No les parece? ¡¿No creen que soy mejor que ella?! — su ego herido clamaba por aceptación y supremacía.

— ¡Sí! — dijo Lucy.

— ¡Por supuesto! — replicó Dinah más rápido que un estudiante desesperado por conseguir puntos extra en la universidad. — Alexa, ¡esa mujer no es ni la mitad de la mujer que eres!

Una persona resentida con su pasado no se detiene hasta reparar el error que cometió. Y aunque Alexa no se había disculpado, hasta ahora, con su ex mujer por todo lo que había hecho, en cierto modo seguía teniendo un deseo platónico de retomar su casamiento. Eso porque Alexa podría hacer las cosas de otra manera. Quería una nueva oportunidad, aunque no le importaba la imagen que había dado a Lauren y a todos en la agencia, puesto que ya se consideraba una persona nueva después de seis años.

La Amante de mi Esposo (ℭ𝔞𝔪𝔯𝔢𝔫) - TraducciónWhere stories live. Discover now