Capítulo 63

463 27 6
                                    

   -Bueno, recapitulemos lo que hemos hablado hasta ahora. Este hombre, que te secuestró y te hizo daño no solo quiere que adoptes legalmente al niño, sino ¿Qué también te cases con él?

  La cara de asombro de la psicóloga era casi tan grande como mi rabia, ella entendía lo que estaba diciendo y me sentía escuchado por primera vez en mucho tiempo.

  -¡Sí, al principio no podía creerlo, bueno, ya me lo esperaba, él siempre a querido eso!, pero yo, no puedo aceptarlo, yo soy un hombre, debería casarme con una mujer, debería proveer a mi familia, debería ser fuerte e independiente. Sin embargo, soy una maldita niñera, como una estudiante de colegio, yo debería ser fuerte y sostener a mi padre y a mí hermana con un trabajo desente. Pero él se a encargado de quitarme todo, bueno, realmente ni siquiera lo intenta, la vida me a quitado todo poco a poco, parece que todo lo único que quiere es forzarme a estar con él. A veces quisiera salir corriendo, huir de aquí y no volver, pero no quiero abandonar a mi familia, a mi sobrino, ¡no quiero dejarlo solo con alguien como él!, no puedo sacarme de la cabeza la decepción de mi papá y mi hermana, no quiero que piensen que soy un idiota o algo por el estilo, son mi familia, son todo lo que tengo, bueno, ya ni siquiera sé que tengo, siento que puedo contar más con Michael que con mi padre.

  La psicóloga se sacó los lentes y por un momento me miró en silencio, tragué saliva preocupado, probablemente me diría algo que no me gustaría oír.
   —Entiendo como te sientes, pero escucha, primero, viendo tu situación creo que es muy complicado seguir con tus ideales, el mundo ya cambio, el concepto moderno de masculinidad es otro y no solo te dará problemas en esta situación, también en todas las áreas de tu vida, esa mentalidad ya no puede continuar. Segundo, no creo que tu padre te vea como un idiota, solo no comprende por completo tu situación, es complicado, bastante a decir verdad, no cualquiera habría podido lidiar con todo lo que tú lidiaste, hay mucho que tomar en cuenta en tu caso y muchas cosas que podrías hacer, podrías empezar por ti, cambiando para bien. Por lo que me estás contando me doy cuenta que eres alguien muy inteligente, no solo te cerraste a tus ideas, todo lo que haces es muy bueno, justamente lo que a muchos hombres les falta hacer, el trabajo que tienes es totalmente digno, solo sería malo si robaras o algo por el estilo, y eso se entendería perfectamente debido a tu sitúa. Pero en su lugar tomaste riendas en el asunto y le sacaste provecho, supiste usar las herramientas que tenías, eso es algo muy inteligente, ahora, lo que sí me está dando algo de que pensar es ese tema del matrimonio, dime ¿Tú por qué no crees que deberías casarte con él?—
Me atraganté con saliva de tan solo escuchar esa pregunta no podía creer lo que me decía, sin embargo era entendible, un poco, tenía que ver bien todo el panorama.
—Bueno, él es quien me secuestró, ¡embarazó a mi hermana!, a veces tengo flashbacks de cuando él me golpeaba, a veces también tengo flashbacks de cuando me forzaba a tener sexo...
Me detuve un minuto, tenía algo que decir pero no sabía cómo expresarlo, ni siquiera estaba seguro de lo que estaba por decir.
—Cuando estaba en mi pueblo, tuve relaciones con muchas mujeres, les pagaba y eso, entonces cuando ellas me tocaban a veces recordaba a él sobre mí, a veces era malo y pedía que pararán, a veces no era tan malo, solo dejaba que siguieran y ese recuerdo se iba olvidando, a veces me llegan flashbacks pero ya no me llevan a él, ahora es a ellas. Cuando siento algo que me relaciona con lo que me hizo ya no lo recuerdo sobre mí, ahora solo me lleva a ellas, no es lo mejor pero creo que es un avance—.
La psicóloga me miró un momento, pude ver su boca abierta en asombro y como tragó saliva para luego escribír en su cuaderno.
—Bueno, eso es algo muy común en gente con trauma, si te a ayudado es bueno, pero tal vez podrías modificar eso por recuerdos más agradables, estar con prostitutas no es siempre lo mejor...
La psicóloga me miró a los ojos y luego se levantó de su silla, tomó una botella de agua y la bebió de golpe.
  —Sabes, me preocupa mucho el tema de tu matrimonio, por lo que veo, haz sabido manejar perfectamente bien tu trauma, solo necesitas una red de apoyo familiar, pero la propuesta de matrimonio, ese es el tema más fuerte que veo ahora, esto es muy repentino. Dejando de lado los problemas del pasado, no pienses en lo que te hizo, piensa en el ahora, supone que es un hombre normal y no te hizo nada, pero obviamente tiene sus defectos, todos los tenemos, cuéntame, ¿qué te haría decirle que no a su propuesta ahora dejando de lado el pasado?—.
Lo pensé un momento, no tenía muchas quejas por ahora, más allá del trabajo no nos relacionamos mucho.
—Tal vez, el hecho de que está muy poco en casa, no me gustaría una pareja que apenas veo; también, no me agrada mucho su historial de parejas, a tenido demasiadas parejas sexuales, no me gusta mucho eso, es hipócrita de mi parte decirlo, pero ver tantos hombres, es raro. No me gusta que es muy pegajoso, llega de la nada y me abraza por la espalda o intenta besarme, no me gusta eso. A veces cuando estoy con él y se me acerca no puedo soportar tenerlo en cima, es irritante, me tiene harto, no puedo soportar tenerlo en cima, lo veo y quiero irme, pero si me voy no tengo nada afuera.

El ático. Yaoi Hard SadomasoquistaWhere stories live. Discover now