Capítulo 61: Dispara, por favor

15.2K 915 267
                                    

Música sensualona en multimedia. En caso de que os guste, a partir de ahora pondré todos los nombres de las canciones en las notas de autor. A disfrutar del capítulo se ha dicho (este va a ser un poco más largo de lo habitual). También deciros que voy a hacer otro preguntas y respuestas, así que ya saben.


|Narra  ________|


El silencio que siguió a mis palabras fue mucho más ruidoso que el sonido que hizo el disparo que acababa de matar a Deanna. Rick bajó el arma y me miró de una forma que jamás le había visto, casi paternal. 

Me dolía todo el cuerpo. Estaba agotada tanto emocional como mentalmente. Una vez la adrenalina que se había apoderado de mi cuerpo cesó, una nueva sensación me invadió. Tenía la sensación de que me habían absorbido todas las energías y por un instante pensé que caería al suelo. No podía más.

— ¿Qué coño dices, _______? —Preguntó Tom, observándome como si acabara de soltar la mayor burrada que él hubiese escuchado jamás.

— ______ —Rick dijo mi nombre al mismo tiempo que terminaba de bajar su pistola, dejándola descansar a su costado. 

— Rick, ellos estaban muy enfermos, infectados de lo que fuera. He estado completamente expuesta a lo que quisiera que tuvieran. Tienes que dispararme antes de que se esa mierda se propague más —Cerré los ojos, más por necesidad que por otra cosa. Me sentía completamente abrumada y un dolor inmenso me traladaba el cráneo—. No quiero contagiaros a vosotros, no lo puedo permitir. Una epidemia es lo peor que le puede pasar a cualquier comunidad, suficiente tenemos ya con los caminantes.

El hombre no dijo nada y mi hermano seguía mirándome como si mi razonamiento fuera rotundamente absurdo. Rick comenzó a retroceder hacia atrás y elevó las manos, llevándoselas a la cabeza, como cuando un policía ordena justo antes de arrestar. Sé que mi proposición era una locura, ninguno de ellos me volaría la cabeza. Fui una estúpida al pedirle aquello a Rick, él jamás podría ejecutar tal cosa, pero yo sabía lo que se tenía que hacer. No podían seguir deambulando por el mundo, todas las muertes que habíamos sufrido eran la prueba de ello. La Zona R era la única alternativa que quedaba para tratar de reconstruir la sociedad y un brote de una enfermedad desconocida podría poner todo eso en riesgo, destrozarlo en cuestión de días. Seguramente ellos mismos tendrían que guardar cuarentena por precaución.

Ante la duda del líder, supe que me tocaba a mí tomar la decisión difícil. Evidentemente, yo quería vivir. Tenía quince años, joder. Pero jamás me perdonaría ser egoísta si eso significase el sacrificio de la gente a la que yo más quería. Había perdido a demasiadas personas y de muchas de esas muertes yo me sentía responsable. No me quedaba otra que romper ese círculo. Este fue el único momento en mi vida donde pensé que el fin justificaba los medios.

— Puedo hacerlo yo —Traté de dar firmeza a mi voz, sonar segura. Mi hermano no decía nada, tan solo me miraba. Entonces pensé en que si Rick dudaba con esto, el hecho de que su hijo también estuviera enfermo no podría superarlo—. Rick, por favor.

¿SOLA?  (Chandler Riggs y tú) *EN PROCESO DE EDICIÓN*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora