Capitulo veintiséis.

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¿El quería que yo no lo matara? ¿Quiere piedad?

-No me pidas algo que no puedo tener por ti, piedad. No me importa que me hayas dado la respuesta necesaria, me hiciste la vida imposible, fuiste el villano de mis pesadillas y ¿Sabes cuánto tiempo he esperado para este momento? ¡Desde aquel día!– Esmeralda me da un largo y filoso cuchillo, miro por última vez sus ojos, se lo entierra en la cabeza sin piedad... y asi, todo acabo con la vida de Fidel.

-Bien hecho, Emily, bien hecho – Sonrío en mis adentros ¡Ya he matado a las dos personas que odio!

Esmeralda se me acerca y me sopla la cara ¡Por Dios que aliento!

Ahora me encuentro en la casa de mi difunta abuela, al parecer mi abuelita no estaba, lo podía saber porque no había olor de galletas, si no que estaba la señora Atilana, la persona que me cuido desde que tengo uso de razón, Esmeralda aparece a mi lado y me dice que escuche la conversación.

-¡Estoy muy feliz por usted! Pero ¡Tengo años que no lo veo, venga y se sienta! – un hombre, de más o menos dos metros de altura, entra y se sienta en el sofá, la señora estaba realmente feliz por la visita de aquel hombre- Dígame ¿Qué paso con tu mujer, por fin?

Aquel hombre agacha la cabeza, y con pesar, contesta.

-Se fue, ya tu sabes porque.

-Si lo sé – Ese hombre se le acerca a ella y dice.

-Prométeme, Atilana, que cuidaras a mis hijos, las amaras como nunca, y jamás te olvides del pequeño detalle, aquel "Secreto" que te he contado jamás se lo digas a alguien.

-Lo prometo...

¿Espera? ¡Cual secreto!

-¿De qué hablan? – le digo a Esmeralda.

-Ya sabrás quien viene y espero que lo tomes con toda la madurez posible.

Entonces todo se volvió oscuro...

Y ahora yo me encontraba tirada en alguna parte, cuando me levanto, lo primero que mis ojos pueden visualizar son los muebles destruidos, el piso estaba cubierto de sangre, en las paredes habían garra y con el líquido carmesí escribieron: The Bye.

Es la casa de la señora Atilana... joder.

-¡Muy bien, esperemos que esa señora no se ponga a dar rodeos! ¿Qué sigue ahora querida hermana? ¡Quiero saberlo!

-Espero que todo salga bien.

- Y yo esperaba tener una buena vida y mírame ¡No todo en esta vida se consigue!

-Seré fuerte, no voy a rendir - ¡Si, no me voy a rendir! ¡No tengo miedo! ¿¡Qué FUE ESE SONIDO!?


Mi GemelaWhere stories live. Discover now