8. Aleteo

2K 114 4
                                    

Lux sintió como la calma le invadía a medida que caminaba por el Arena para la prueba de sonido, y, seguramente, tenía que ver con el hecho de que Harry estuviera a su lado. Ellos realmente se odiaban, pero cuando estaban en presencia de la música, ella notaba unos lazos invisibles que lo ataban a él, uniéndolos.

La rubia entró en el escenario micro en mano, con los auriculares en las orejas, permitiéndole escuchar su propia voz por encima de todo el sonido. Su estómago se contrajo al mirar todos los asientos vacíos que pronto ocuparían cientos de personas mirándola.

-¿Preparada, dulzura? – La voz de Harry le llegó a través del auricular y ella dejó escapar un suspiro de alivio.

-Preparada. – Dijo por el micrófono, escuchando como la música empezaba a sonar. Cantó la canción unas cuantas veces, escuchando lo que Harry le decía por los auriculares, teniendo en cuenta sus consejos sin dudar. Vio como las cámaras entraban, preparadas para filmar pequeños clips de ella y Harry trabajando juntos para enseñar a la audiencia lo bien que se llevaban. Harry subió al escenario, ajustándose el gorro gris que llevaba, algunos de sus rizos asomándose. Lux lo vio ir directo hacia ella y sintió como si su corazón... Como si su corazón aleteara.

Frunció las cejas mientras negaba con la cabeza, pensando que estaba loca.

-Rápido, dime un cumplido. – Dijo Harry mientras se acercaba, hablando en un susurro.

-¿Qué? Ugh, no. – Respondió Lux, arrugando la nariz en repulsión.

Harry suspiró.

-Solo trágate tu orgullo y hazlo, y yo te responderé igual. De esta manera, podemos pensar en los cumplidos ante las cámaras y, con suerte, parecer amigos, o al menos, algo parecido.

Él tenía razón, le ayudaría a pensar en Harry como un amigo si él le decía algo bonito por una vez.

-Em… - Hizo una pausa. – Me gusta tu nariz.

Las cejas de él se arrugaron mientras alzaba la mano para tocarse la nariz.

-¿Qué? A nadie le gusta mi nariz. ¡Deja de ser sarcástica!

-¿Qué hay de malo en que me guste tu nariz? Jesús, no sabes recibir cumplidos. – Resopló Lux, cruzándose de brazos. – Me gusta tu frente, también.

-¡¿QUÉ?! – Chilló Harry. - ¿Pero a ti qué te pasa? ¡Esos son unos cumplidos horribles!

Lux notó como tocaba su nariz y luego su mano se movía hasta su frente, por debajo de los rizos, su cara pensativa y confundida. Ella se preguntó qué pasaba, porque su nariz era grande y su frente ancha debajo de esos rizos. A ella no le importaba, le gustaban.

-Me gustan. – Dijo Lux bajito. – Me gustan las cosas de ti que no son perfectas. ¿Tan malo es eso?

-A mí no me gustan. – Contestó él, pero su voz no sonaba dura o borde, solo confusa y casi… Insegura.

-Bueno, eso son… Chorradas. – Dijo, alzando las manos al cielo. – Muy bien, te diré los mismos cumplidos que te dice todo el mundo. ¿Mejor? Harry, me encantan tus ojos, hoyuelos y rizos.

Él parpadeó, dándose cuenta que esos eran los cumplidos que recibía siempre, nunca lo había notado. No estaba seguro que nadie se hubiera acercado y le hubiera dicho: “Me gusta tu nariz.” De la manera que lo había hecho Lux.

-Gracias. – Susurró, y ella puso los ojos en blanco, asumiendo que le decía gracias por los nuevos cumplidos, pero él en verdad le agradecía por elogiar las dos cosas que le hacían sentir inseguro. Aun así, no se lo aclaró.

-Me encanta tu culo. – La voz de Harry y su cara eran serias y Lux rio.

-¿En serio? – Se giró a mirarse en sus pantalones, sin ver el atractivo. – Bueno, gracias.

-Y me gusta que tus cejas sean oscuras y tu pelo claro. – Añadió, asintiendo lentamente.

Lux sintió una sonrisa alzar las comisuras de sus labios ante su mirada incómoda y ella sabía que, probablemente, las cámaras los grababan de lejos, así que, cuando sintió la necesidad de hacer algo inesperado, lo hizo. Avanzó hacia él y lo rodeó con sus brazos, presionando las palmas de las manos contra sus hombros.

Él gruñó ligeramente, sin devolverle el abrazo, pero al cabo de poco pasó una mano por sus hombros con cuidado, acercándola a él. Mantuvo la otra mano en el bolsillo y apoyó la barbilla contra su coronilla mientras se abrazaban durante unos segundos. Lux se sentía reacia a dejarlo ir porque sabía que probablemente sería lo más cerca que nunca estaría de Harry, pero no quería abrazarlo por demasiado tiempo y que empezaran rumores de que salían juntos. Ese era el último rumor que quería que circulara por ahí.

-Ahora, ríe como si hubiera dicho algo realmente gracioso. – Le susurró Harry antes de apartarse del abrazo. Lux se echó hacia atrás, riendo a carcajadas. Él la vio como se movía, con la cabeza ligeramente inclinada hacia atrás, el pelo rubio agitándose y la mano tapándose la boca mientras reía. Se encontró a sí mismo sonriendo mientras ella reía, de lo auténtico y real que sonaba. Espera un segundo…

-¿Estás riéndote en serio? – Preguntó, frunciendo el ceño.

-¡Dios, sí! – Dijo sin parar de reír. – La idea de ti diciendo algo divertido… ¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!

Él puso los ojos en blanco, pero notó como una sonrisa afloraba a sus labios e intentó reprimir la risa que intentaba escaparse de ellos. Falló miserablemente y empezó a reír también, cogiendo un mechón del pelo de Lux y estirando un poco para llamar su atención.

-Vamos a volver al trabajo. Y sigue sonriendo. – Le recordó, señalando su boca mientras forzaba una gran sonrisa. Lux empezó a reírse otra vez, esta vez de lo loco que parecía Harry con esa sonrisa en la cara.

-Creo que… Eso no será un problema. – Dijo ella suavemente, sus ojos brillando.

Los ojos de Harry estaban un poco demasiado chispeantes para alguien que la odiaba hasta la muerte y el pensamiento de sus ojos resplandeciendo cuando la miraba, hacía que a Lux le aleteara el corazón.

Su corazón tenía que dejar de hacer eso.

Dark SideDonde viven las historias. Descúbrelo ahora