Dark Side

18. Roto

Harry siguió las huellas sangrientas a través de la nieve, todo su cuerpo temblando y sus ojos enloquecidos. Tragó saliva mientras rodeaba un árbol, viendo un destrozado y sangriento cuerpo reposando en el frío suelo. La única cosa de la que se dio cuenta fue el rubio dorado del pelo, embadurnado de sangre y corrió hasta ella, cayendo de rodillas a su lado.

Un sonido suave se escapó de sus labios, algo así como un lloriqueo.

-Lux… - Alzó la mano para tocarla y fue cuando lo vio. Sus manos llenas de sangre. Caliente, pegajosa, carmín sangre, y usó esas manos para darle la vuelta a su cuerpo para verle la cara.

Harry sintió como el estómago se le encogía mientras sus ojos se abrían al verla y antes de que pudiera retroceder, conmocionado, los ojos de la rubia se abrieron y lo miraron, sus labios con una sola pregunta.

-¿Qué me has hecho?

-¡NO! – Se irguió de golpe en su cama, sintiendo como su pecho se movía con dificultad, arriba y abajo, arriba y abajo. Parpadeó varias veces, encontrándose en su cama de la casa de Factor X, Louis dormido en la cama al lado de la suya.

-Joder. – Murmuró, pasándose las manos por su pelo y mirando la hora.

6:04AM. Era la hora de levantarse de todas maneras.

Era la mañana de la actuación y Harry había esbozado un plan la noche anterior para evitar que Lux se escondiera en su baño toda la mañana otra vez, lo que sospechaba que intentaría.

Rodó fuera de su cama en sus pantalones de chándal, sin molestarse en ponerse ninguna otra prenda, solo cepillándose los dientes antes de ir a la habitación de Lux y Sara. Sin picar, abrió la puerta, viendo la habitación oscura y solo iluminada por la suave luz del sol que empezaba a alzarse en el cielo. Entró en silencio, moviéndose hacia la cama de Lux, esquivando zapatos y ropa tirada en el suelo.

Retiró un poco las sábanas, deslizándose debajo de ellas, en la parte libre de la cama de la rubia, y girándose para mirar su cuerpo dormido. Su respiración era acompasada, sus labios ligeramente abiertos, su mano en su mejilla, su pelo en su cara. Con una mano, se lo apartó de la cara, poniéndolo detrás de su oreja, sonriendo dulcemente al ver su cara.

Su pesadilla más reciente todavía lo perseguía, tanto, que sentía la necesidad de presionar su mano contra el pecho de Lux para asegurarse que su corazón seguía tras sus pechos, latiendo fuerte.

Así que lo hizo.

Su mano se deslizó bajo las sábanas, tocando primero su hombro izquierdo, su respiración empezando a acelerarse mientras iba descendiendo por el suave tejido de la camiseta que ella levaba, moviéndose a su pecho izquierdo.

Los ojos de ella se abrieron lentamente, su aliento atascándose en su garganta al ver a Harry frente a ella, su mano presionando su pecho y sus ojos ligeramente cerrados. Parecía como… como si estuviera escuchando sus latidos.

-Hey. – Susurró, viendo como abría los ojos, abriéndose un poco más al verla despierta.

-Hey. – Murmuró como respuesta, sin quitar su mano. – Solo estaba escuchando los latidos de tu corazón.

-Oh,  – Lux asintió, como si fuera algo normal, - ¿todo bien por ahí abajo?

-Sí. – Él suspiró en lo que sonó como alivio. – Sí. Es fuerte.

-Harry… - Murmuró lentamente. – Me estás asustando un poco.

Él retiró su mano rápidamente.

-Cierto. Perdona.

-Um, - ella rio nerviosamente, - ¿por qué estás en mi cama?

Él pensó en contarle la verdad, pero ella estaba tan relajada y somnolienta que no quería recordarle que la actuación era esa noche y asustarla.