Dark Side

39. Conservar

[N/A: Aviso, capítulo lleno de feels pero a lo burro. Creo que todas veis lo que va a pasar, no digo más. Quiero avisaros porque... ¿recordáis lo que dije en la nota del principio de todo? He intentado mantener la tercera persona al mínimo en todos los capítulos, pero al final de este no he podido y lo repito todo mucho para que se entienda quién hace qué... Así que decidme si todo se entiende bien y tal. Lo siento mucho, pero en ese momento no me parecía bien escribir la rubia o la americana o el británico, etc. Ya entenderéis por qué...]

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Lux tenía una botella de champagne en la mano izquierda, su vestido arremangado en la derecha, y caminaba de puntillas alrededor de la piscina exterior. Miró a la clara agua azul y se imaginó lo precioso que quedaría su vestido flotando con el agua.

Sus labios encontraron el cuello de la botella y la echó hacia atrás, dando un largo trago antes de bajarla y ponerla en el suelo a su lado. Sin pensarlo, se acercó al borde de la piscina y saltó, llevando el vestido con el que había actuado, el vestido que, probablemente, valía más que su coche.

El agua estaba fresca, pero su cuerpo se ajustó rápido mientras ella permanecía sumergida, atreviéndose a abrir los ojos en el cloro para ver cómo se veía el vestido flotando a su alrededor. Era precioso, como había sospechado, casi como sangre. Por un momento, todo parecía quieto, en calma, sus latidos lentos y acompasados.

Por un momento, todo se sintió bien.

Luego alguien saltó con ella, sus brazos rodearon su torso y la empujaron fuera del agua. Alguien pensó que se estaba ahogando, quizás, o solo querían sacarla del agua. De cualquier manera, estaba un poco molesta de que su momento de paz hubiera sido arruinado, así que se giró con una mueca de fastidio en su cara, secándose los ojos.

-No me chilles. – Suspiró con fuerza al ver a Harry, sus rizos mojados y cayendo sobre su cara. Él los apartó de su cara y el cuerpo entero de Lux dolió al ver las gotas de agua de sus pestañas.

-Vale… - Susurró ella, mirándolo. - ¿Cuándo has salido?

-Justo ahora. Yo… He tenido una especie de revelación. – Dijo quedamente, su acento sonando como terciopelo.

-¿Oh? – Lux arqueó una ceja, nadando lejos de él en la piscina mientras veía como el vestido se diseminaba a su alrededor. Él también miró, alzando las manos para coger un poco del material.

-Has arruinado el vestido, ¿sabes? – Hizo una especie de sonido de “tsk” con su boca, negando con la cabeza.

-¿Qué eres tú, mi estilista gay? ¿A quién le importa? – Ella rio, tirando del vestido lejos de él, moviéndose hasta que su espalda estaba contra la pared de la piscina, tan lejos de él como era posible.

Él se acercó a ella lentamente, sus ojos fijos en los de ella todo el rato mientras se movía, recordando a un tiburón tras su presa. Ella se preguntó brevemente como sería ser arrasada por Harry Styles.

-Cuéntame sobre esa especie de revelación que has tenido. – Dijo ella, viéndolo acercarse. Las manos de él se enrollaron alrededor de sus muñecas como esposas, sujetándola firmemente.

-Bueno, estaba pensando sobre ti… sobre lo que me dijiste, hace unos días… ya sabes. – Dijo suavemente, mirando al agua como un cachorrito tímido, algo en lo que solo se convertía cuando estaba con ella. – y estaba pensando que cuando seas vieja y estés arrugada, que espero que cuando pienses de vuelta en estos días… que puedas sonreír y pensar en mí y en lo mucho que nosotros… lo mucho que nosotros…

La voz de Harry se rompió y alejó la vista de ella, aclarándose la garganta y poniéndose rojo.

-¿Me has imaginado como una bella mujer mayor? – Lux sonrió con suficiencia, inclinando la cabeza, esperando disipar su vergüenza. Él sonrió, volviendo a mirarla, encogiendo los hombros.