45. Paredes

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AVISO: Quitando el hecho de que soy una tonta súper sentimental, os digo que casi me he puesto a llorar solo traduciendo. Supongo que el hecho de traducir con X de Ed Sheeran de fondo no ayuda. Soy tonta. De cualquier manera, tened pañuelos a mano. HACEDME CASO.

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-¡¡ES LA SEMANA DE LOS DUETOS!!

Todo que vio todo el mundo fue un jersey rojo y una pelambrera rizada mientras Harry corría por los pasillos en busca de su novia. Tenía una sonrisa permanente en la cara desde el segundo que se había enterado. Mentores y concursantes hacían duetos esta semana, la semana perfecta para Harry y Lux porque él podía ayudarla cuando su voz estuviera débil.

-¡Lux! ¡¡LUX!! ¡¿Ha visto alguien a Lux?! – Gritó en su fuerte acento, sin parar ni un segundo para escuchar las respuestas de los demás. Sus largas piernas delgadas lo llevaron sin esfuerzo a la parte de arriba de las escaleras y, mientras alcanzaba el piso de arriba, casi le pasó por encima a Sara, quién soltó un chillido agudo cuando él paró a milímetros de golpearla.

-¡HARRY! – Chilló sin aliento. - ¡Casi me pasas por encima!

-Lo siento, Sar. Eres tan pequeñita que no te había visto. – Le lanzó una sonrisa descarada, viéndola reír mientras le golpeaba el brazo. – Ey, ¿has visto a Lux? ¿Has oído las buenas noticias?

-Emm… - Sara hizo una pausa. - ¿Qué pregunta debería responder primero?

-Lux. – Declaró inmediatamente, viéndola sonreír.

-Está en nuestro cuarto. ¿Y las buenas noticias?

-¡Es la semana de los duetos, babe! ¡Mejor vete a por tu chico y prepárate para una competición dura! – Él rio, alborotándole el pelo mientras volvía a correr hacia la habitación de Lux.

-¡Os vamos a MACHACAR! – Dijo Sara contenta, girándose para buscar a Niall igual que Harry buscaba a Lux. Todo el mundo quería elegir su canción tan rápido como fuera posible.

-¡Luxie! – Gritó Harry mientras abría la puerta sin picar.

La vio pegar un bote de la sorpresa, sus ojos abiertos como platos mientras se giraba.

-Perdona, amor. ¿Te he asustado? – Dijo quedamente, casi susurrando mientras se sentaba detrás de ella en la cama. Presionó sus labios contra su hombro delicadamente, apretándole las caderas. Ella asintió un poco, inclinándose contra él al momento, dejando escapar un suspiro.

-¿Estás bien? – Preguntó, girándose para mirarla a la cara. Sus ojos estaban medio abiertos y ella asintió otra vez, girándose para acurrucarse en el hueco de su cuello.

-Tengo buenas noticias. – Susurró directamente en su oreja, sonriendo lentamente. Sus cejas se alzaron mientras levantaba la cabeza para mirarle mientras hablaba. – Es la semana de los duetos.

Una sonrisa iluminó su cara al instante, lo que hizo que él sonriera también, porque nada lo hacía más feliz que verla feliz. Ella cogió la pizarrita de su mesita de noche.

¿Qué vamos a cantar?

-Tengo unas cuantas ideas… Quiero que descanses un par de días más y luego te llevaré a practicar justo antes del programa. Me encargaré de todo, solo quiero que te mejores. – Dijo, frotándole los brazos.

Lux lo miró unos segundos antes de suspirar suavemente mientras escribía:

Tengo miedo.

-¿Por qué? – Frunció el ceño, acercándola a él.

No quiero irme a casa todavía. Te acabo de conseguir.

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