18. Fiesta sin control.

4.4K 348 21
                                    

°°°°°°

—El sábado habrá una fiesta, Sam.

—Derek, hace muchísimo no voy a una, siento que estoy oxidada—Se ríe— o peor aún, quizás mantengo mis viejas costumbres.

—Oh, no. Eso sería terrible. Eres toda una salvaje con algo de alcohol en el cuerpo—Le muestro el dedo medio.

—Vete al demonio, Derek Sullivan.

Alguien cubre mis ojos. Sonrío y tanteo a ciegas su mano.

—¿Quién soy?—Pregunta distorsionando su voz con sonidos divertidos.

—Un chico bastante infantil—Le respondo juguetona.

—Me hieres, Sam—Habla Damián besándome en la mejilla.

—Vete acostumbrando, ser una perra es su especialidad—Comenta D con naturalidad. Damián luce sorprendido por la elección de palabras de mi mejor amigo. Yo solo me encojo de hombros.

—Creo que también debes acostumbrarte a la palabra perra— Bromeo. Damián sigue luciendo sorprendido.

—Como sea, ¿Irás a la fiesta del viernes?—le pregunta Derek.

—No lo creo, tengo cosas que hacer—Responde él. Me siento algo desilusionada. Él siempre tiene cosas que hacer por la noche. El límite de horas que pasamos juntos por la tarde son una o dos. Oh por Dios, me estoy quejando mentalmente porque me dedica poco tiempo.

—Comienzo a sospechar que tienes una doble vida—Le digo divertida. Él sonríe.

—Realmente es extraño, Sam.— Comenta Derek—.Ten cuidado, en lo personal, considero dos opciones, Damián es un asesino en serie o es padre de familia y debe pasar la noche en casa para que su esposa no sospeche.

Lanzo una gran carcajada y Damián solo rueda los ojos.

—Considerando que soy un estudiante promedio en una preparatoria, la segunda opción es la que tiene más sentido—Responde. Derek frunce el ceño.

—Como sea. Con o sin ti, querido Dam. Samantha y yo iremos a esa fiesta y lo pasaremos realmente bien—Asiento fervientemente.

_No me agrada la idea de que no estés ahí, pero tampoco me la perderé—Digo. En el fondo está la intención de que cambie de opinión.

—No puedo ir, lo siento—Contesta escogiendose de hombros. Solo sonrío.

Derek comienza a hablarle a Damián sobre otras cosas, por lo que utilizo ese momento para pensar un poco.

¿Qué estoy haciendo mal? O sea, en mi perspectiva, cuando le gustas a alguien y ese alguien te gusta a ti, lo mínimo es intentar pasar tiempo juntos ¿No? Comprendo que yo no haya querido ponerle título específico a lo que tengo con Damián, sobretodo si solo comenzó hace dos semanas, pero hay algo aquí, fluyendo entre él y yo, aunque él está poniendo muy poco de su parte para que funcione últimamente.

Tengo paciencia bastante limitada. Espero él no la agote No le he pedido grandes cosas, solo pasar tiempo juntos más de esas dos o en otro momento del día.

—¿Estás bien?—Me pregunta robando un corto beso de mis labios. Niego con la cabeza—. ¿Por qué?

—Siento que no quieres pasar tiempo conmigo—Él forma una perfecta O con su boca.

—¿Es por la fiesta? No me gustan demasiado—Responde. Bufo y me alejo. Le digo a D que debo conversar con Damián a solas así que nos alejamos un poco.

—Me involucré contigo en una fiesta el año pasado, Einstein.

—Fui obligado a asistir— Se defiende.

—Te veías muy cómodo—Insisto.

—Pero no lo estaba del todo hasta que te vi.

-No seas cursi. Estoy intentando discutir un punto aquí—Me quejo aunque se me hace tierno lo que dijo.

—Es la verdad.—Lo miro directamente a los ojos. Después de unos segundos desvía la mirada. Miente.

-No me vuelvas a mentir, Damián. Si hay algo que quieras decir, este es el momento, luego ya no habrá oportunidad—Le advierto. Él guarda completo silencio, pero luego me toma de las manos.

—No hay nada, Sam. Confía en mí—Dice.

—Está bien. Te creo—Respondo sinceramente.

Es tan fácil para mí creer en las personas, pero si quebrantan mi confianza ya no hay vuelta atrás. Es un quiebre definitivo. No hay segundas oportunidades.

•••••

Bebo otra cerveza. Derek me observa de forma desaprobatoría. No me importa. El alcohol burbujea en mi sangre libremente y me agrada muchísimo.

—¿Quieres bailar?—Me pregunta un guapo chico universitario. Lo observo un poco y asiento.

Él me jala de la cintura y me acerca a su cuerpo. Entrelazo mis manos por detrás de su cuello. Se siente bien. La música es suave, por lo que me permite hacer movimientos lentos, no sensuales, solo lentos.

—Eres hermosa—Dice el chico en mi oído.

—No estás mal—le digo riendo.

—¿Cuál es tu nombre?

—Samantha.

—Podríamos salir de aquí, Samantha, se me ocurren cosas divertidas para hacer—Propone. Sonrío.

—Podrías irte al diablo—Le grito y me alejo.

—Sam, no bebas más—Habla Paul cuando me acerco a la mesa que compartimos. La preocupación en su voz me hace reaccionar. El alcohol generalmente inhibe mi sentido común. Quizás aún me queda un poco de eso, tengo que conservarlo.

—Voy a detenerme en este instante—Hablo con dificultad. Mis amigos sonríen aliviados por completo.

—Llevamos casi una hora intentando convencerte—Comenta Paul.

—Soy muy obstinada, chicos. Ya deberían saberlo—Me defiendo. Paul revuelve mi cabello. Le doy mi botella de cerveza para que la aleje de mí.

—¿Te ibas a liar con ese chico?—Pregunta Derek ofreciéndome un vaso de agua. Lo acepto gustosa.

—Claro que no, solo bailamos unos minutos y ya.

—Fuiste muy coqueta—Me dice. Lo miro como si fuese estúpido.

—Siempre lo he sido, no le veo lo extraño.

-Oh, sí, tienes razón.

—¿Estás celoso?—Le pregunto pinchando su brazo.

—Sí y mucho.

—Yo también—Acota Paul.

—Par de posesivos—Les digo jalándolos a la pista de baile entre risas.

Derek está frente a mí y Paul atrás, gritamos y saltamos al ritmo de la música. Yo amo a mis amigos, son los mejores del universo, incluso cuando se comportan como los reyes del control de mi vida. Con cada uno de mis brazos rodeo sus cuellos para acercar sus oídos a mi boca.

—¡Los amo idiotas!—Les digo. Ambos besan mis mejillas para después seguir bailando.

________________

Different Girl [#Changes 1]Onde histórias criam vida. Descubra agora