Different Girl [#Changes 1]

30. Charla de amigos.

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La mesera trae nuestros capuchinos y los deja sobre nuestras mesas junto a nuestros rollos de canela, uno de nuestros placeres culpables.

—Demonios, trajo seis, D—Le susurro cuando ella se retira. Él sonríe.

—Me comeré cuatro, no tengo problema en eso—Responde.

—Ni siquiera lo creas, idiota. No comerás mi parte—Lo desafío apuntando con mi bolsita de azúcar.

—Oh gay Dios, te ves tan intimidante—Se burla—, que hasta te daría los míos, Sam—Le saco la lengua. Cojo un rollo y lo llevo a mi boca. Dulce y sabroso, lo que necesitaba.

—Están muy buenos—Le digo a Derek. Él asiente devorando la mitad de uno de un mordisco, sin mayor inconveniente. Balbucea un poco intentando decir algo que no entiendo. Luego levanta un dedo indicando que espere. Ruedo los ojos.

Endulzo un poco mi capuchino y comienzo a beberlo. Estoy en el paraíso. Tres rollos más tarde Derek se encuentra satisfecho y decide hablarme nuevamente.

—Samantha Collins—Dice. Lo observo—a ti te gusta el hermanito de Jennifer, ¿Verdad?

—No digas hermanito, suena como si tuviera 10 años, Derek.

—Tal vez los tiene.

—Tarado—Ambos reímos y se encoge de hombros.

—Responde a mi pregunta—Lo medito un poco, no es algo que me haya planteado antes.

—Cuando dijiste lo de asalta cunas, creo que fui clara al decir que no lo soy, D.

—Sabes que te conozco mejor que a nadie, tu boca decía algo pero tus ojos gritaban una cosa diferente.

—No lo sé, quizás me atrae—Le digo—, pero...

—Uy, hay un pero, eso no es bueno.

—¿Olvidas que tiene novia?

—Eso no es la gran cosa, Sam—Comenta restándole importancia.

—¿No es la gran cosa?-Pregunto sorprendida—¿Qué pasaría si viene un tipo, gusta de Paul y pretende alejarlo de ti?

—Eso es muy diferente, amiga.

—¿Por qué?

—Porque Paul y yo nos hacemos bien, nos potenciamos, nos amamos. Brillamos juntos, ¿Lo entiendes?—Asiento—La chica esa que sale con Vincent, es una víbora, se huele la maldad en ella, él necesita a alguien mejor, él merece brillar con sus virtudes junto a alguien mejor.

—Se supone que no lo conoces muy bien—Respondo algo incrédula.

—Soy muy observador y no hay que ser muy listo para ver que él es tan buena persona como Jen.

—Sí, tienes razón, D. Vincent es un chico increíble, me tardé en verlo.

—Siempre ha estado ahí, ¿No?

—Es divertido si lo pienso, yo lo golpeé la primera vez que lo vi, solo porque pensé que era igual a todos.

—Estabas equivocada.

—Soy bastante mala con las primeras impresiones—Suspiro—Supuse que Damián era un buen tipo y aquí estamos.

—Gracias a todo eso, ahora, te estás replanteando algunas cosas, Collins.

—Que me atraiga Vincent, no quita el hecho de que tiene novia y si intento algo con él en estas circunstancias, me tacharán de zorra rompe relaciones y me verán como solía ser antes.

—¿Eso realmente te importa—Derek toma mis manos—Sam, amiga, el cambio fue por ti, porque tú lo querías así, no por lo que digan los demás—Toma un respiro. Vendrá un largo sermón.

>>Han pasado más de cuatro meses en los que no tuviste sexo con alguien que conocieras hace dos horas, eso te demuestra a ti y solo a ti, que lo que hacías no era una enfermedad o algo, así como cuando temías ser ninfómana—Lanza un pequeña carcajada. Yo también me río, recuerdo cuando dije eso—. Solo era diversión y entretenimiento; ya es hora de arriesgarte a algo más importante, Sammy. No como con Damián, claro está, sino algo real, una relación de verdad, sin ocultarte, sin mentiras.

Hace una pausa para tomar aire.

>>Jugar todas tus cartas y luchar por mantener a quien quieres a tu lado, probablemente no sea una relación eterna, pero que cambies, de una vez por todas, esa bizarra mentalidad que tienes sobre el sexo opuesto. No todos los hombres son iguales. Tampoco solo existe esa clasificación que inventaste.

—Los gays, los vírgenes y los mujeriegos—Acoto avergonzada.

—Sí, esas categorías existen, pero créeme, hay mucho más que eso. Vincent por ejemplo, estoy seguro no pertenece a ninguna de esas dos, es tu deber descubrir en cuáles encaja.

—Jessica me hará la vida imposible si hago algún movimiento.

—Da igual, quedan pocos meses para salir del instituto, además, hay personas peores que ella a las que te enfrentaste en el pasado. Eres fuerte Sam, si quieres ir a por Vincent, hazlo y ya.

—Me estoy poniendo muy nerviosa con esta conversación.

—¿Estoy siendo muy intenso? Lo siento—Suelta mis manos—Debe ser toda el azúcar que ingerí. Niego con la cabeza

—No es eso, D, tú eres intenso todo el tiempo. En verdad me estás motivando a lanzarme por un acantilado sin paracaídas—Bromeo— Demonios, solo dije que él me atraía y ahora con todas tus palabras hasta creo que me gusta, que de verdad Vincent me gusta.

—Es lo divertido de la vida, ¿No?—Sonrío—Te amo, Sam, te amo más que a Paul y lo sabes, es momento de que yo deje de avalar tus conductas estúpidas y comience a pensar en que tienes que superar todos esos problemas que ha generado en ti el maldito de tu padre.

Cuando lo nombra mi semblante cambia. Me siento mal de pronto.

—No lo metas en esto, por favor.

—Él es la base de esto, Sam. Por su culpa piensas que todos los hombres son unos hijos de puta, a menos que sean gays como yo.

—Lo sé, solo no soporto hablar de Dominic.

—Está bien, lo lamento, pero piensa en todas las otras cosas que te dije, Collins. Mi momento de sabiduría está caducando—Bromea. Hago un puchero para él—Eres tan jodidamente adorable.

—Solo contigo, es porque tengo confianza.

—Con Paul también lo eres.

—Por supuesto, es quien me quitó al amor de mi vida—Digo frunciendo el ceño—Oh, a todo esto, le diré que me amas más a mí.

—Paul ya lo sabe también. Aunque sean amores diferentes, tú siempre serás mi prioridad.

—¿Por qué me quieres tanto?

—Porque eres Samantha Collins, ¿Por qué más habría de quererte?-Se burla. Lo golpeo en la cabeza.

—Vete al infierno, Derek.

—Allá iremos a parar, Sammy, tenemos nuestros lugares reservados, te lo aseguro.

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