Mi sueño se hace realidad (Nico Di' Angelo y __________) *en edición por normas*

Capítulo 65~ ¡Por fin! Son la pareja más difícil de juntar

Narra ___________

Las clases habían acabado, era medio mes de Diciembre, en la cafetería que trabajaba por sorprendente que fuera para mi, me dieren vacaciones que así que estábamos nuevamente en el campamento mestizo, mis amigas sabían que no estaría en casa con ellos.

Los romanos habían venido, era divertido pasar vacaciones con ellos, me gustaba escuchar cada anécdota que Reyna contaba y amaba ver como es que hasta las ninfas le lanzaban bellotas a Octavian en la cabeza.

(...)

Nico me había pedido que lo viera en el lago, estaba súper nerviosa, si lo se, han de pensar: "¿porqué rayos estas nerviosa si es de los más normal que Nico y tu vayan a muchas partes juntos?" Pues aquí esta la repuesta.

Nico sólo me gustaba cada vez más, y con eso me refería a que Nico iba cavando más y más profundo en mi corazón hasta llegar al fondo de este, cada vez se hacía de un lugar más hondo, descubrí que si Nico me miraba a los ojos, me sonrojaba un poco, algo que había controlado según yo, no quería parecer tómate todo el tiempo que Nico me viera, mi pulso enloquecía cada vez que Nico me tomaba la mano, cada vez que rozaba mi mano, o cada vez que me abrazaba por los hombros, sabía que nuestra amistad era más parecida a un noviazgo que una amistad, y como deseaba que eso fuera realidad.

Al llegar al lago, vi a Nico de pie, le daba vueltas a su anillo de calavera, vestía sus jeans oscuros, su espada negra y una camiseta negra, se veía tan guapo, verlo ahí, me recordaba cada día que no estaba loca y que esto no era un sueño, que Nico en verdad existía y estaba aquí, por única ocasión especial, (porque no es nada normal que la voz de una diosa *cof cof Afrodita cof cof* te aconsejara como vestir) me acomode nuevamente unos shorts de mezclilla, junto con una camiseta negra que había comprado y me gustaba, las mangas estaban a la altura de mis hombros, tenía delgados tirantes que la sostenían, era holgada, camine hacia el lago.

-Nico, hola, aquí estoy- dije y él volteo a verme.

Nico contadas veces me ha visto con ropa que no sean jeans, sólo dos veces si contamos la vez que mi madre me obligo a usar una falda y la vez que me vio con un vestido en ese Halloween donde él y yo... Donde nos besamos.

Cuando me vio, sonrió y me tendió la mano, cuando la tome, enredo sus dedos entre los míos, mi pulso enloqueció y me obligue a controlarlo, empezamos a caminar por la orilla del lago.

-te... Te ves hermosa- dijo Nico y lo vi a sus bonitos ojos negros.

Él me veía, le sonreí y asentí, sus ojos me atrapaban pero como pude respondí.

-g-gracias Nico.

Llego un momento en que nos detuvimos a ver el agua, me recargue en su hombro, cerré los ojos y me acerque más a él, su brazo estaba en mi cintura, su cara estaba en mi cabello.

-yo... Yo te cite aquí por una sola cosa- dijo con un tono algo nervioso.

-ok, ¿por qué motivo me citaste aquí?- pregunte y lo vi.

Su mano derecha aparto mi cabello, había dejado su espada de lado, y con ello deje mi daga, sonreí un poco al sentir su tacto en mi mejilla, pareció pensarlo una sola vez más y suspiro mientras asentía.

-ok, yo... Yo... Yo no se cómo decirlo- parecía muy nervioso, se veía tan adorable.

-tranquilo ¿si? Respira- dije y él me sonrió apenado.

Sus mejillas que usualmente eran pálidas y con un poco de color, ahora estaban sonrojadas, a mi parecer que un chico se sonroje por algo, es tierno.

-________, siempre que te veo, por mi mente pasan varias cosas, eres muy muy bonita- al decirlo me vio fijamente a los ojos como lo hacia desde hace un rato -y se que somos amigos, pero la verdad es que ya no lo soporto, no soporto ser sólo tu amigo, ver como las personas se fijan en ti y tu ni en cuenta- rió un poco hasta que me acaricio la mejilla -me gustas, y me gustas mucho... No, mentira, estoy perdidamente enamorado ti.