34. ¿Y qué es lo que quieres, Luca?

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Esta es la segunda parte de "Elevame hasta tocar el cielo, Luca"

...

Me era inevitable no pensar en Nathan, joder, yo no era tan perra como él.

Una lágrima resbaló por mi mejilla, Luca giro mi rostro hacia él y limpio las pocas lágrimas que iba derramando; eran amargas y llenas de tristeza.

—No vamos hace esto por venganza, no lo vale —expresó.

He de decir que sus palabras me hicieron sentir segura y haciéndome tomar confianza, tanta, que ya no pude detenerme y comencé a hablar.

—No puedo dejar de sentirme tan estúpida  —empecé, él solo se miraba y escucha de forma atenta, tal como quería ser escuchada—, primero Aldrey, luego Steven, después Nathan. Soy un total asco. Simplemente no entiendo como es que siempre me ilusiono y siempre terminan rompiendo el corazón —mis lágrimas comenzaron a caer sin parar—. Y me siento más estúpida por estar vestida de está manera, y el estar aquí, en tu casa, por culpa de Nathan, me siento como... como una prostituta.

Me puse de pie, avancé hasta quedar frente a Luca.

—Solo mírame —pedí, eso hizo. Me miró de pies a cabeza—, estoy utilizando recursos bajos para sentirme valorada, porque esto ya no es por Nathan, es por mí, porqué por segunda vez un hombre me hizo sentir poca cosa y no merezco sentir así.

Pase una de mis manos por mi cabello, me sentía tan frustrada, enojada, decepcionada pero conmigo misma, todo lo estaba haciendo mal de un tiempo para acá; Nathan hizo que perdiera mi equilibrio.

—¿Quién fue el primero? —preguntó Luca, lo miré inexpresiva. Nadie me había preguntando eso, nadie conocía la historia de como fue la primera vez que me rompieron el corazón, solo Karen y Heissen la saben porque en su momento me ayudaron a sobrellevarlo, sin embargo jamás volvimos a hablar de ello aunque siempre quise hacerlo pero me da vergüenza. 

Necesitaba sacarlo, justo ahora.

—Se llama Aldrey, el chico popular más deseado de la preparatoria —comencé recordando. Flexione mis rodillas y me senté sobre ellas en el piso, pegué mi cabeza en una de las rodillas de Luca, automáticamente comenzó acariciar mi cabello. 

Suspire cerrando los ojos volviendo al momento exacto donde sentí como me desgaraba por dentro por primera vez.

Iba comenzado mi último grado en la high school y el primer en ese nuevo plantel. Por obviedad, Karen y Heissen no estuvieron conmigo pues ellos son mayores que yo y entraron a la universidad directamente, lo que quiere decir que comencé sola, fueron duros los primeros días; no tenía la confianza suficiente y para ser sincera los primeros días siempre son lo peores.

El hecho de haber despertado del coma hace apenas 4 meses antes y el no recordar casi nada; no ayuda mucho a mi seguridad, al contrario, me cohibí de hacer muchas cosas, tenía miedo de dar pasos en falso. 

Aldrey, al principio se comportó muy amable conmigo cuando iba a las canchas de futbol a despejar mi mente un rato y a escribir guiones de novelas que tenía en mente, que de cierta forma me hacían sentir menos sola. Aldrey leía mis historias locas junto conmigo y reímos mucho. Tiempo, empezamos a frecuentamos otros lugares, empezamos a salir y todo se tornó mejor para mí.

He de decir que al principio todo fue rosa pastel, fue mi primer "novio" y para mí todo era mágico. Duramos poco más de 3 meses pues una noche de invierno, descubrí todo:

Medio kilómetro de distanciaDär berättelser lever. Upptäck nu