Capitulo 15

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POV ANASTASIA

Es de noche y estamos en la habitación de Cristian. Tiene unas orejas muy marcadas debajo de sus ojos y está muy agotado. Ha estado de reunión en reunión y las cosas no han ido bien. Ha habido unas peleas muy feas y Cristian ha estado de un humor de perros. El día de ayer llego a un punto, en que me mando lejos y se encerró en el despacho todo el santo día.

Me sentí sola y aunque Luna me estuvo haciendo compañía por varias horas, la frialdad de Cristian enfrió mi estado de ánimo. Aunque he avanzado con las clases de lectura, aun no puedo leer de corrido.

Estaba sola, llegue hasta su habitación y me acosté en su cama. El olor de su cuerpo no es como el de los otros vampiros. La mayoría de ellos tienen ese tenue olor a sangre y aunque es en pequeñas cantidades los humanos nos damos cuenta. Eso sumado a que nos ven como comida, da miedo.

Entrando la madrugada sentí que estaba en la habitación. Sus ojos estaban completamente rojos y me di cuenta que estaba hambriento. Según lo que me dijo Luna, la sangre que antes consumía no lo está satisfaciendo. Así que estaba comiendo más pero no funciona. Su estómago no toleraba más sangre y terminaba vomitando.

No dijo nada. No deje nada. Solo me saque la camisa quedando solo en sostenes. Trago con dificultad pero se acercó a mí. Me beso lentamente hasta que su instinto gano.

-lo siento mucho- digo. No entendí lo que quería decir por lo que fruncí el ceño. Lo supe cuando me mordió. Antes sus mordidas eran controladas y no dolían. En cambio esta, fue dolorosa, ya que fue con hambre y sin querer unas cuantas lágrimas rodaron por mis mejillas. Sentí que algo cortaba mi piel con tanta fuerza que me dio miedo. No lo había echo antes, solo sentí... su ganas de comer.

Borro mis láminas con besos y solo me abrazo por varios minutos u horas, no están muy segura del tiempo. No sé en qué momento se quedó dormido pero me dio el tiempo para observarlo.

Mi dedo, acaricia su pómulo y sonrió al sentir un poco de calor en su cuerpo. Cuando está enojado su piel se vuelve helada como un tempano de hielo pero cuando esta relajado su piel es tibia. Aun no le pregunto por qué tiene esa característica. Los vampiros en sí, son criaturas calculadoras y frívolas.

Dibujo sus labios con mi dedo y sigo hasta su mentón. No me quedo mucho tiempo en esa parte y sigo bajando hasta su cuello. Es ancho y musculoso. Las venas se pueden ver y son gruesas como la mayoría de su cuerpo.

Los vampiros que hay, no son muy musculosos. Más bien son de una contextura normal. En cambio Cristian, es realmente musculoso. Su abdomen tiene muchos músculos y me encanta acariciarlos. Los puedo recorrer cuando está dormido pero durante el día no los puedo ver.

 Los puedo recorrer cuando está dormido pero durante el día no los puedo ver

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Sigo recorriendo su cuerpo hasta que llego a su parte baja. Me sonrojo cuando veo su llamativa V. este hombre está bien trabajado y bien construido. Nada en él está de más y nada más le falta. Quizás un poco más de calor y quedaría perfecto.

Llamado de la sangre: Cristian y AnastasiaWhere stories live. Discover now