Capitulo 21

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POV ANASTASIA

-me molesta la luz- digo a Luna que está cocinando. Digo mientras mis ojos se sienten raros. Un ardor me está molestando desde la mañana y a veces mi vista se ha vuelto borrosa.

-deberías descansar. Has estado estudiando mucho. Tu cerebro está cansado, pequeña. Deberías dormir un poco- dice Luna mientras deja un poco de té delante de mí.

-lo sé. Solo que hay tanto que leer y analizar que estoy bajo mucha presión- digo mientras me derrumbo en la silla.

-¿Han logrado encontrar algo?- dice.

-lo único que hemos descubierto que hay una planta que les da alegría a los vampiros. En motivo es un misterio y Cristian no me deja estar en el laboratorio sin él. Así que lo único que puedo hacer, por ahora, es aprender a leer y escribir bien- digo mientras bebo un poco de té.

-¿Qué flor? Hace mucho tiempo que no hay flores que les haga mal a los vampiros. Según mis registros- dice y cierro los ojos.

-no tengo ni idea de cómo se llama. Es solo que es raro- digo. No diré todo lo que mientras no confirme lo que estoy investigando.

-debe ser una flor antigua- dice y frunzo el ceño.

-lo más seguro. Me iré a dormir. No me siento bien- digo. Dejo la mitad del te intacto y me voy a la habitación. No quiero mi habitación, sino que quiero estar cerca de Cristian pero como él no está, el olor en su pieza me ayudara.

Me comienzo a desvestir y busco una toalla. Cristian tiene unas muy grandes y me voy a su baño. Junto un poco a de agua caliente y luego comienzo a echar agua fría. La tina queda un poco más de la mitad y me meto en ella.

Encuentro una botella de jabón líquido y desparramo un poco en el agua. Comienzo a jugar con el agua y hago mucha espuma. Comienzo a jugar con ella y sonrió. Esto jamás hubiera pasado si hubiera estado en la casa con doña Lucrecia. Ella era egoísta con sus cosas.

-nunca pensé verte así- dice. Miro hacia arriba y veo a Cristian desde la puerta.

-yo... si te molesta me puedo ir- digo mientras me intento levantar.

-no me molesta. Solo me incomoda- frunzo el ceño y él se ríe.

-¿Por qué te incomoda?- digo mientras me acomodo mejor.

-porque tiene mucha piel expuesta y a pesar de ser un vampiro, tengo instintos de hombres. Y digamos la verdad, tienes un cuerpo increíble y yo no tengo mucho control- dice y levanta los hombros como restándole importancia.

-pero la mayor parte del tiempo estas controlado- digo y él sonríe.

-si pero casi nunca estas desnuda, salvo cuando te escondo la ropa por algún motivo- dice y sonríe.

-¿Que es lo que te provoco?- digo en un susurro.

-muchas cosas. La gente piensa que a ser vampiro no tenemos necesidades básicas humanas. Tenemos hambre, necesitamos el baño y tenemos ganas de tener sexo. Por algún motivo hay vampiros e híbridos en la cuidad- dice y sonríe.

-¿Qué es lo que quieres hacerme?- digo en voz baja.

-muchas cosas- dice.

-tú has... bueno... ¿has tenido relaciones con alguien más?- digo.

-si pero no fue placentero. Mi abuelo quería que conociera el placer del cuerpo. Así que busco alguien que me ayudara y que tuviera experiencia. Fue horrible- frunzo el ceño.

-¿Por qué fue tan mal?- digo mientras me acomodo mejor en el agua.

-la mujer era bonita pero fue directamente al ataque. No estaba listo ni mucho menos excitado. Ella hizo una manual buena pero no estaba listo. Y que me guio en lo que tenía que hacer, no fue placentero. Llegue al límite pero no me gusto. Así que simplemente no busque más placer- dice y se sienta en la barandilla de la tina.

Llamado de la sangre: Cristian y AnastasiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora