Llamado de la sangre: Cristian y Anastasia

Capitulo 27

POV CRISTIAN

Ana ha estado un poco distante desde hace unos días. Algo pasa por su cabeza y no es nada bueno. Luna también la ha notado un poco más distante pero piensa porque está embarazada. Y la verdad, estoy aterrado. Traer un bebé indefenso a este mundo, es lo más complicado que se puede imaginar. El, sería la prioridad antes los demás e incluso su propia madre.

He estado trabajando arduamente para poder detener lo que secretamente está saliendo a la luz. Los humanos quieren dejar de ser esclavos y formar una población alejada de los vampiros. Están cansados de ser alejados y simplemente vivir para alimentar a vampiros.

Estoy de acuerdo. Podemos vivir tranquilamente los dos seres, por separado. Podemos pedir su sangre de una forma civilizada y no esclavizándolos, obligándolos a entregar algo que solamente le pertenece a ellos.

Quiero que esta guerra acabe. Quiero que podamos vivir seguros y pienso que darles la libertad que están pidiendo, es la solución. Lástima que los demás vampiros, no piensen de la misma manera. Ellos quieren tener la comida a su disposición y perder al humano no está dentro de su ideal.

Dejo los papeles a un lado y niego con la cabeza. ¿Cómo puedo demostrarles que lo que estamos haciendo está mal? Si pudiera demostrar que Ana, está conmigo porque ella quiere, que me da su sangre porque lo quiere y que es feliz, muchas cosas cambiarían. Pero no quiero que sepan que está aquí y mucho menos que es lo que es.

La alejarían de mí y la podrían hasta matar.

Me levanto enojado del sillón. Ese pensamiento me ha dejado un sabor amargo en la boca. Ella no morirá, si en mis manos está la posibilidad de salvarla. Ahora, que ella está llevando mi bebé, es mi responsabilidad.

Camino hasta el dormitorio, donde vi por última vez a Ana. Está sentada cerca de le ventana, leyendo el libro negro del abuelo. Esta tan concentrada que no se ha dado cuenta de mi presencia. Veo que trajo unas cosas del laboratorio.

-¿Qué haces?- digo. Ella me mira y sonríe. Dios, aunque este preocupada siempre tiene esa sonrisa en sus labios para mí.

-solo estaba leyendo otras hojas del libro que le perteneció al abuelo. Es bastante interesante. Cuenta lo que sintió cuando comenzó a darse cuenta que era diferente. Fue una mescla de sorpresa, miedo y odio a sí mismo- dice mientras se acomoda en el sillón que está a un lado de la cama. No sé cuando llego esto aquí.

-no le encuentro sentido a que leas eso. Estamos buscando una solución a los problemas. Las vivencias de ellos, no nos importa. Además, ¿Cómo llego ese sillón a la pieza?- ella me sonríe y niega con la cabeza.

-le pedí a Luna que me ayudara a traerlo. Con unas telas que había en las piezas hicimos estos cojines que nos quedaron hermosos. Trabajamos un poco pero es genial el resultado. Aunque termine con los dedos todos pinchados- dice mientras mira las yemas de sus dedos.

-¿Cómo te sientes?- digo cuando me gano a su lado.

-bien. Aun no me acostumbro a la idea de que seré madre pero creo que este pequeño me lo hará más fácil. Se nota un poco. Aunque no puedo decir que mi embarazo será igual que el de las demás, ya que no soy humana sino un vampiro. Así que no puedo dar nada por seguro- dice mientras se acomoda. Me gano a su lado y tengo que reconocer que el sillón es cómodo.

-eso es bueno. Deberías dejar de leer eso. No te hace bien. Debes de estar tranquila y con todo lo que estás leyendo, más la investigación de nuestra sangre, es muy poco lo que estas descansando. Te he sentido inquieta desde hace unos días- digo y ella se acurruca en mí.

-tengo muchas cosas en la cabeza y hay cosas que no me gustan. Además de ciertas cosas que he encontrado y no te he dicho por miedo a tu reacción- frunzo el ceño. Intento alejarla pero no me deja y no puedo usar la fuerza bruta con ella. Es mi hijo es que correría más riesgos.