Un mundo destruido por la ambición de unos pocos.
Una distribución que discrimina a la gente por su sangre.
Una única cuidad en pie después de la guerra entre humanos y los seres de la noche.
Una sociedad que se encuentra divida en 4 grupos.
El enc...
-no entiendo para que necesitamos todas estas cosas. Aun no comprendo cómo leer bien del todo y me dices que debo aprender a usar esto. Me voy a estresar- digo cuando veo que Cristian sale y entra con varias cajas.
-vamos a aprender a usar esto juntos. Yo tampoco sé cómo usar esto pero mi abuelo quiere que trabajemos con algo- dice mientras deja otra caja en el suelo.
-pero no tenemos nada con que trabajar. Además, ¿Dónde están los materiales y los insumos? Aquí solo veo potes de vidrios y no sé qué más- digo mientras inspecciono unas cuantas cajas.
-digamos que hay algo que investigar que solo tienes tu- dice. Lo miro como si estuviera loco.
-yo no tengo nada. Con suerte tengo vida. Ni recuerdos existen en mi cabeza. ¿Que podría tener yo?- digo mientras me siento en un banco que está en una esquina.
-si lo tienes. Es algo que corre por tus venas, Ana- suspiro derrotado.
-mi sangre- digo en un susurro.
-así es. Mi abuelo dijo algo que tiene relación con tu sangre y si es cierto, serias la salvación de la humanidad. Hay algo en tu sangre que la hace especial- dice. Juego con un mechón de cabello.
-pero, ¿Que es tan especial lo que hay en mi sangre que todo el mundo lo quiere?- digo un tanto frustrada.
-no tengo ni idea pero por eso, vamos a investigar qué es lo que tu sangre tiene de especial o que la hace especial. Es un tanto complicado pero solo entraremos Luna, tu y yo en este lugar. Nadie a parte de los tres, debe entrar aquí. Y tú no volverás a entrar hasta que aprender a leer y escribir bien- dice y hago un puchero.
-estas siendo un poco serio conmigo. Me da la sensación que hay algo más y no lo estás diciendo- digo para mí misma.
-puede pero cuando piense que es necesario, lo sabrás. Ahora ve a comer a algo y luego espérame en la mesa de la cocina- dice en un gruñido.
-¿Para qué?- digo mientras camino rumbo a la puerta.
-para que sigamos con las clases. No hagas tantas preguntas, solo hazlo- dice y me doy vuelta para encararlo.
-estas de un genio terrible. Deberías medir tus gruñidos de vez en cuando. A veces siento que estorbo en esta casa, más cuando reaccionas tan frio y distante conmigo. No soy perfecta y no se mucho más de lo que ustedes me han dicho. Así que solo pido que me tengan un poco de paciencia. Yo no soy como ustedes, y por más que intente dar mi cien por ciento, no siempre contigo eso es suficiente- termino de hablar y salgo de la habitación. No quiero pelear más por mi lentitud para aprender pero a veces, simplemente me gustaría seguir sabiendo un poco y a la vez nada.
Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.
-me estas enredando- le digo una vez más cuando me está explicando las multiplicaciones.
-no debería ser enredado si pones atención- dice y me fulmina con la mirada.