Capitulo 22

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Después de una refrescante una ducha me coloco mi ropa y salgo del baño, ahí de pie está Max listo cambiado y recién bañado.

-¿Listo? - asiente me acerco a él y cómodo el cuello de su camisa - No me has contestado - le digo viéndolo a los ojos - ¿Te a gustado? - vuelvo a preguntar.

-Me a encantado - le doy un beso.

-Es hora de ir a casa - sin más salimos nos despedimos de Scarlett, Daniel y Raúl en el restaurante y vamos a de regreso a la mansión.

-Haz estado muy callada - me dice una vez que llegamos a la puerta de mi cuarto. Suspiró y lo miro a los ojos.

-Lo que dijiste de mis labios - le digo - no somos parejas que no se te olvidé.

-Era un trato no ibas a besar a nadie más que a mí - me dice serio.

-Y no lo he roto - digo algo molesta - que yo sea tu pareja de juegos no significa que mi cuerpo te pertenezca, no soy objeto para que tú seas mi dueño - le aclaro lo mas calmada que puedo sonar - no sé porqué pero tuve la impresión en como la forma en como actuaste por celoso debido a tu orgullo de hombre - suspiró - o a celos por algo mas que cariño,- si me refiero a amor - espero que se la primera - ruego no quiero arruinar nuestra relación, nuestra amistad.

-No fueron celos por amor - me asegura, respiró con alivio pero algo muy dentro de mi duda de esas palabras.

-Eso espero - con mi mano acarició sus rostro y le doy una beso casto - Cuando juegas no hay espacio para los celos, solo para el placer - el solo me observa - no olvides - le doy otro beso y sin entro en mi habitación.

(..)

-¿¡Que!? - gritó a todo pulmón no puedo creer que me haiga hecho esto, yo estaba a cargo de la fiesta de la fundación y de la mansión, ¿Como me pudo hacerme esto?.

-Lo siento Mía creí que sabias - se disculpa Tania mi secretaria.

-¡Lo mató! ¡Juro que lo mató! - digo furiosa mientras salgo de mi despacho a dirección al de Isaac - ¡Me puedes explicar! ¿¡Porque demonios cambiaste el día de la fiesta de la fundación!? - le gritó furiosa, está con Roberto y Max. Isaac solo alza la mirada resopla y habla.

-Número uno no me grites - dice con voz calmada - número dos no quiero que la fiesta de fundación sea el mismo día de la fiesta de la mansión - no digo nada - así que la fiesta de la fundación será el Viernes y de la masion el Sábado ¿Cuál es el problema? - dice encogiéndose los hombros.

-Sabes cual es el problema - me acerco así su escritorio ignoro a los idiotas sentados y me coloco en medio de ellos, asiento mis manos en el filo de la mesa y acerco mi rostro lo más que puedo a Isaac mientras lo fulminó con la mirada - Que la que estaba acargo de la organización de las fiestas soy yo - trató de sonar lo más calmada que puedo - sabes que odio que se metan en mis asuntos y peor ¡sin mi autorización cambiaste los días! - dolor un golpe en la mesa.

-Tienes razón, me disculpó - sonríe sabe que cuando estoy furiosa es lo que más odio.

-¡Me importa una mierda tus disculpas! ¡No debiste meterte! - le gritó.

-Ya cálmate Mía, pareces que estás en tus días - dice Roberto divertido, me giro y le sonrió.

-Tu crees que estoy de humor para tus bromas - lo fulminó con la mirada - no me provoques más - vuelvo a ver a Isaac -quiero votación - le digo es algo que sabemos hacer cuando queremos disputar algo.

-Ya la hicimos - dice tranquilo, no lo puedo creer.

-Puedo saber cuándo - le digo más molesta - es que a caso no pensabas decirme nada.

-Fue hace un momento - se encoge los hombro - de hecho te iba a llamar antes que entraras como una loca - sonríe - son cuatro contra dos, así que ya está decidido - regreso a ver a Roberto maldito traidor, miro a Max que no ha dicho nada par de traidores.

-Marixa - digo molesta - te apoyo.

-Si es mi pareja, es obvio que me daría su voto - si, pues mi pareja no me apoyo a mí, pienso pero no digo nada - es lo mejor Mía, estaremos más tranquilos en la fiesta de la masion y podremos disfrutar - no puedo creer que siendo mi amigo no sepa que estoy furiosa por el hecho de que no me avisará, que no haya tenido la amabilidad de informarme.

Le sonrió con mi mano hago la señal de en mis labios como si cerrará algo y pongo un candado Isaac ya sabe que significa.

-No seas infantil Mía - sin más doy media vuelta para salir de su despacho - No nos vas a hablar - lo ignoro - Mía madura - escucho antes de salir de su despacho y cerrar de un solo golpe la puerta haciendo que varios empleados me regresen a ver.

(..)

Tres días desde que Gabriela y yo no hablamos con nadie les hicimos la ley de hielo. Aún que claro que esta noche iba hacer imposible seguir con esto, ya que era la fiesta de la fundación y obviamente tendríamos que cruzar algunas palabras, pero eso aún no me quitaba el enojo.

Yo estaba acargo si querían cambiar el día tendrían que a verme informado no cambiar todo sin mi autorización, sin decirme nada absolutamente nada.

Hoy solo fui medio día a la empresa no tenía pendientes estaba en el despacho resolviendo unos pequeños asuntos para la gran fiesta de mañana estaba muy emocionada adora estás "reuniones tan placenteras".

La puerta del despacho se abre es Max quien está usando un pantalón negro y una camisa blanca que tiene sueltos los tres primeros botes dejando ver su pecho - se ve muy sexy - sonríe con picardía y aún desde esta distancia puedo notar el brillo en sus ojos ese brillo que me encanta. Tampoco le dirijo la palabra a él, elevó una ceja con una sonrisa y bajo mi vista a la computadora.

Ignorando su presencia o eso intento pero no puedo aún sin verlo escucho sus pasos que se dirigen así mí dirección y eso acelera mi pulso, son tres días que no lo he besado, que no sentido sus caricias, su calidad piel, que no me ha hecho gritar de placer - cálmate Mía es solo sexo puedes vivir sin eso - no creo - puedo sobrevivir hasta mañana, no te rindas solo no tienes que verlo, tocarlo y mucho menos hablarle - es fácil lo voy a lograr.

Cierro mis ojos me voy a poner de pie para irme cuando siento sus manos en mi hombro - mierda - sus piel maldita sea sus dedos comienzan a rozar mi piel por todo mi hombro hasta subir a mí cuello y llegar lóbulo de mi oreja, joder mi cuerpo me traiciona no puedo evitar sentir placer.

-No me vas hablar - susurra en mi oído, no contesto no lo haré si quiere follarme que lo haga pero no voy a dirigirle la palabra, no hasta mañana ese fue el trato que hicimos con Gabriela no les vamos a dirigir la palabras hasta la fiesta de mañana - Como quieras - entonces muerde mi oreja, joder muerdo mi labio inferior - Párate - me ordena y lo hago quita la silla y me da la vuelta para que la vea a los ojos.

-No tienes por qué hablar - sus manos se pasan en mi cintura y de un golpe me sienta en la mesa - Solo disfrutar - maldita sea como encantaba que hable así - Claro que si puedes - junto mis cejas sin entender a que se refiere, de su bolsillo saca un antifaz de color negro y sin decir nada me lo coloca por lo que no puedo ver nada, todo era oscuro. Me coge las manos y me las envuelve en su cuello - No te sueltes - me ordena antes de colocarse entre mis piernas , sus manos se posan en mis nalgas sin más me lleva en sus brazos, envuelvo mis piernas en su cintura, mala idea sentía su polla dura debajo de su pantalón rozar mi sexo, se sentía tan rico.

El continuo caminando no sabía a dónde me llevaba y no podía preguntárselo, subió las gradas supuse que iríamos a su cuarto o al mío, pero me equivoqué solo me bastó que me recostara en la cama para saber dónde estaba, mis manos mi piel sabía dónde estaba lo que me sorprende es que él me haya traído.

Pero el pensar de ¿Porque me trajo? ¿Cómo se le ocurrió traerme? Fueron ignoradas al preguntarme ¿Que me va hacer aquí? Eso me exitaba que tenía en mente, que iba hacer capaz de hacer, como iba hacer que grite de placer.

Mi respiración se agitó ante adrenalina de saber que me tenía preparado.

Otro capítulo a petición del público 😉.

Espero que OS guste 😉

Seducción-(+18) @BlueRoseAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora