|Vergüenza|
Narra Omnisciente
"Eso ha estado bien." Opinó Kim a espaldas de Camila quién acababa de tocar una canción en su guitarra. "¿Quién era?" Indagó la asiática llegando a su lado para sentarse.
"Leona Lewis." Informó y la surcoreana asintió recordando a la intérprete. "Cantaré en el baile de halloween." Contó inesperadamente la morena antes de volver sus ojos a la guitarra.
Decir que aquello había tomado a la asiática por sorpresa es poco, sus ojos rasgados se abrieron tanto como le era posible, miraba a la chica baja esperando que esta dijera «te la has creído.» Pero aquellas palabras no llegaron.
Kim frotó el lateral de su cuello. "¿Estás... estás segura?" Sondeó prevenida, Camila se encogió de hombros mientras sus dedos jugaban con las cuerdas de su guitarra.
Kim Soo carcomió sus labios, aunque no sabía exactamente el por qué ¿Estaba emocionada? o ¿Estaba nerviosa? Camila era una chica tímida en cuanto a la parte musical, ella solo la había escuchado cantar un par de veces, en ambas la había pillado sorpresivamente.
"No tengo ni idea de que cantar." Explicó con agobio dejando la guitarra a un lado para cubrir su rostro con sus manos.
La castaña rodeó los hombros de la más pequeña con su brazo y con cariño la atrajo hacia ella.
"Solo debes decir lo que sientes a través de la canción que escojas, pero sobre todo... disfruta del momento." Aconsejó Kim al notar la vacilación de la más joven.
«Decir lo que sientes» Aquellas palabras tuvieron más significado para la morena de lo que Kim hubiese imaginado.
"¡Kaaki!" Irrumpió Sofía con un puchero. "Tío Hyun no me deja dormir con sus ronquidos." Se quejó arrastrando pesadamente los pies hasta la cama de su hermana.
Sofía se subió a la cama y Camila la acostó a un lado de está para luego cubrirla con el edredón hasta el cuello, la niña tallaba sus ojos mientras bostezaba, la morena depositó un beso en su frente y le susurró un «descansa.»
Kim observó con ternura la escena y haciéndole señas a la Cabello mayor le aviso que debía irse, con un asentamiento de cabeza la inglesa se despidió y se acostó junto a su hermana, está vez colocando la cabeza de la más pequeña encima de su brazo para así rodearla y evitar que se cayera mientras dormía.
Al día siguiente; Primer Ensayo.
Camila se sentó en medio del escenario del auditorio sin saber exactamente qué hacer, miró la guitarra colgando en una de las paredes, el precioso piano, las flautas y tambores... habían al menos diez instrumentos diferentes pero ella no sabía cuál tomar porque simplemente no tenía ni idea de que cantar.
Caminó hacia un lado del escenario, se agachó y liberó los frenos en las ruedas del piano para con mucho esfuerzo tirar de él hacia el centro.
Con agotamiento se sentó en la banqueta y miró el pulcro teclado del instrumento, cerró sus ojos y notó como sus dedos formaban la melodía de Sign of the times, se limitó a tocar en silencio con sus ojos cerrados, recordando como su madre le enseñaba a tocar el piano.
"Sé que estas allí Lauren." Habló la morena quien hábilmente se había dado cuenta de la presencia de la ojiverde.
La chica alta se sobresaltó al ser descubierta.
"¿Cómo... sabias que...?
"Usas mucho perfume." La interrumpió sin dejar de tocar. "Solo quería decirte que está es mi hora de ensayo y que creo recordar MUY BIEN" Resaltó las últimas dos palabras. "Haberme rehusado a hacer algún dúo contigo." Señaló sin abrir sus ojos.
