|Lo siento|
Narra Camila
“¿Podrías escucharme?” Demandó Lauren teniendo la osadía de quitarme uno de los auriculares de mis oídos arruinando por completo el coro de Because for you de Kelly Clarkson. Saqué mi rostro de mi casillero para mirarla de mala manera por su acción. “Lo siento.” Dijo por millonésima vez en los últimos quince minutos.
Retiré el otro auricular de mi oído, total ya había frustrado mi parte favorita de la canción donde Kelly Clarkson vocaliza la tercera estrofa de la canción con tanta desolación que sientes un bajón de ánimos al instante, y luego el toque final; el estribillo con el piano de fondo durante unos segundos hasta que el resto de los instrumentos se unen a su cántico desgarrador.
“¿Qué es lo que sientes exactamente?”Cerré mi casillero. “¿Haber removido el auricular o haberme dejado como una mendaz delante de tus padres?” Aclaré mirándola con mi cabeza ladeada.
“De verdad lo siento Camz.” Susurró con una expresión de morriña en su rostro y sus ojos verdes tan claros como nunca antes los había visto, tuve que hacer un esfuerzo para no suspirar. “¿Hay una manera en que pueda compensarte?” Inquirió de manera insinuante mientras se acercaba.
Mi ceño se frunció. “La única manera que lo hagas… es lo que nos metió en todo esto.” Insinué y el desdén en su semblante acompañado de su silencio respondieron por ella. “¡Oh!” Exclamé con una sonrisa colmada de pena.
Ante su falta de habla y/o reacción decidí marcharme pero ella me tomó del antebrazo y me observó durante unos segundos. “Lo siento.” Volvió a repetir y tuve que hacer un esfuerzo para no poner los ojos en blanco.
“No, no lo sientes.” Mascullé a pocos centímetros de su rostro para no tener que elevar mi voz y que media high se enterara que estábamos teniendo una pequeña riña en medio del pasillo. “Si lo sintieras lo demostrarías.” Fijé posando mi mano sobre la de ella para soltar su agarre.
Respiró profundamente. “Tenemos que hablar y buscar una solución para esto.” Agitó sus manos, la miré incrédula.
“La solución únicamente la tienes tú.” Presioné su pecho con mi dedo índice. “Quiero ayudarte pero tú no te dejas.”
“¡Pero me encuentro bien!” Chilló exasperada. “¡Si tan solo pudieras verlo!” Aquello me descolocó por completo.
“¡No!” Mi voz salió más alta de lo que pretendía. “Tú eres la que no quiere ver la realidad… ¡Joder Lauren, estás consumiéndote!” Noté como detrás de ella un grupo de estudiantes nos observaban, entre ellos estaban Keana y Bradley. “Abre los ojos de una maldita vez.” Gruñí cerca de su oreja antes de pasar por su lado he irme.
“Camila.” Me llamó y la ignoré aunque podía escuchar sus pasos aproximándose. “Hablaremos, quieras o no.” Determinó tomándome una vez más del brazo para detenerme, tratando de no ser tosca me dio la vuelta hasta que quedamos una vez más frente a frente.
“Ya te he dicho lo que debes hacer.” Recordé librándome otra vez de su agarre y tomando un paso de distancia de ella. “Si no quieres ser ayudada.” Hice una pausa sintiendo la presión en mi garganta. “Por favor no me pidas que vea desde la primera fila como te dañas... porque es muy injusto.” Le rogué, sostuvo mi mirada durante unos segundos, su expresión se transformó a una de sorpresa y tristeza a la vez. Cuando sus ojos abandonaron los míos aproveche para huir por tres razones;
Temía que emitiera otro falso «lo siento».
Temía llorar delante de ella.
Temía acabar cediendo ante aquellos ojos esmeraldas.
Fue entonces que me di cuenta que Lauren volvía a convertirse lo que en un inicio era para mí; temor.
Pero esta vez era tan distinto. En un principio temía por mí… ahora temía por ella.
