Viviendo con playboys

030.

Narra Cat

Los días pasaron, y hoy era el último día de "vacaciones" para luego tener que reincorporarnos al instituto.

Estos días estuvieron normales, salvo por Hunter quien estuvo algo raro. Desde aquel día en el cine encontró con Liam en una situación algo incomoda. Esta raro en el sentido que ya no me trata mal, ni bromea conmigo.

Con el resto está todo en orden. Luke y Jacob pasan mucho tiempo juntos, lo cual me agrada. Cuando Luke esta con él se la pasa riendo y es como si se olvidara de Matt por un momento. Jacob se quedó estos días con nosotros, yo lo invité porque le hacía bien a Luke.

Como hoy es el último de en esta cabaña, arreglamos para ir a un bar a bailar en la noche.

Por un lado, que sea el último día es malo ya que mañana es domingo y al día siguiente hay clases de nuevo. Pero, por otro lado, podré ver a Meg y Candace, que las extraño.

—¡Cat!— me llamo Cole desde el comedor.

—¿¡Qué!?

—¡Ven!

Agh, me levante de la cama y me dirigí a donde se encontraba él. Más vale que sea para algo importante.

—¿Qué necesitas?— le pregunté.

—Hablar sobre algo.

—Dime— me senté a su lado.

—Es sobre Candace.

—No te quiere ver ni en figurita, la lastimaste mucho— respondí.

—No me ayudas.

—Te digo las cosas como son.

—Se que me detesta, pero en verdad la amo y necesito recuperarla. Necesito que tú me ayudes.

—¿Y yo como haré eso?

—No lo sé, trata de decirle que me perdone, por favor— me suplicó.

—Cole, mira, yo si fuera ella no te perdonaría. No creo que lo haga porque yo se lo diga.

Hizo un puchero.

—Agh, de acuerdo— acepté finalmente— lo intentaré, pero no te prometo nada.

—Eres increíble— me dio un abrazó y yo rodé los ojos.

(...)

Estaba sentada en la barra del bar. No se por qué acepté salir, si detesto hacer esas cosas.

Los simios desaparecieron completamente de mi vista a los pocos segundos de ingresar. Liam fue con ellos, últimamente no se están llevando tan mal.

—Hola— dijo una voz masculina a mi derecha.

Me di media vuelta para encontrarme con un guapo chico de ojos claros y cabello rubio.

—Hmm, hola.

—¿Te puedo invitar un trago?— preguntó un tanto nervioso.

—Ehh, si, claro.

No se ni siquiera por qué acepté. Primero, no suelo beber (aunque a veces se me pase un poco la mano), mucho menos en lugares públicos porque puede ser peligroso. En una fiesta privada tal vez si. Y segundo, tengo pareja, nadie en un bar le invita un trago a otra persona si no es para ligar.

—Genial— me entregó una copa con un líquido que sinceramente no tenía idea que bebida era. No sé mucho de alcohol.

La bebí.

Que asco.

Intenté disimular que la bebida había estado horrible.

Pero a los segundos, esa sensación se fue, y me dieron ganas de tomar otra copa nuevamente.

—¿Como te llamas?— preguntó.

—Cat. ¿Tú?

—Jack.

Pedí otro trago, no salgo muy seguido y una vez que lo hago, lo voy a disfrutar.

—Sabes, Cat, eres muy bonita— dijo y me sonrojé— ¿Quieres ir a bailar?

Me tome todo el trago de un sorbo y asentí.

Tal vez, después de esto me sentiré algo mal, no lo sé, siento como si de alguna manera le estuviese siendo infiel a Liam. ¿Bailar con un desconocido que acaba de llamarme bonita?

Narra Hunter

Estaba besándome con una rubia, que anteriormente me había dicho su nombre, pero ahora no lo recuerdo. El beso pasaba a mayores pero ese acto fue interrumpido cuando vi a Cat bailando con un chico.

Estaban muy cerca, el la tomaba de la cintura y Cat reía. Ella tenía una copa de bebida alcohólica en la mano por lo que pude suponer que probablemente esté borracha.

Me separé de la rubia y me miró mal.

—¿Qué haces?— preguntó de mala manera.

—No quiero nada contigo— la rechacé.

Abrió la boca indignada.

—Muérete— me sacó el dedo del medio y se dio media vuelta para irse.

No le di importancia.

Me acerqué más a ellos para observarlos mejor, pero no lo suficiente como para que me vean.

Cada vez estaban más cerca. Cat parecía no percatarse de la situación, estaba borracha. En cambio el chico era quien se le acercaba, maldito idiota.

Narra Cat

No sé cuántas copas tomé, perdí la cuenta en la número 5.

En este momento me encontraba bailando junto a Jack. Estábamos muy pegados, demasiado para mi gusto, pero no le tomé mucha importancia.

—Eres realmente hermosa— me dijo Jack acariciando mi mejilla.

Me pegó aun más a él, nuestros cuerpos ya se tocaban y sus manos descendieron desde mi cintura hasta un poco más arriba de mi cadera.

—Umm gracias— reí con nerviosismo.

La situación ya no se podía frenar, podía sentir su respiración mezclarse con la mía.

No quería besarlo, amo a Liam. Y me siento muy mal por haber llegado a este punto. Nunca debí haber aceptado su invitación a bailar, o directamente su trago. En el fondo sabía que la situación terminaría así.

—¿Puedo besarte?— me preguntó mientras acercaba sus labios a los míos.

Claramente no esperaba una respuesta, me besaría sin más. Y yo estoy muy borracha y débil como para librarme de su agarre.

Dios, si realmente existes, líbrame de esto.