XLIII. Paz

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Prefiero esta paz
que esa guerra
dije en un sueño

y cuando me desperté me pregunté
cuándo será el día en el que prefiera la paz
es decir tu ausencia
tu no presencia en mi cabeza
tu no presencia en mis sentimientos
cuándo será el día en el que finalmente presente bandera blanca
y me rinda
y sólo quede una inmensidad infinita
repleta de vacío impoluto
ahí donde estabas antes

cuándo será el día en el que me retire de esta guerra
este conflicto permanente entre lo que quiero y lo que no puedo hacer
entre lo que fue y lo que pudo ser
entre lo que deseo y lo que necesito
entre tu fantasma y mis nostalgias
entre el costado vacío de mi cama y mi insomnio
entre la falta de tus besos y mi frío
esta batalla armada en la que sólo sale herido un bando
y claro que siempre es el mío
y claro que las balas tienen tu nombre

cuándo será el día en el que llegue a un acuerdo
entre lo que siento y lo que pienso
entre lo que considero sensato y lo que considero instintivo
una tregua para por fin poder descansar
una mediación para por fin poder olvidar

el problema es que prefiero pensar
que yo no soy de las que se rinden
hace rato teñí la bandera blanca
con mi sangre
y prefiero seguir muriendo en esta guerra
a resignarme a no tenerte
prefiero tener a tu recuerdo de enemigo antes que no recordarte en absoluto
prefiero la violencia de la batalla
a la fría calma de la paz
prefiero que me bombardees
que me dispares
que me acribilles
antes que dejar que se cure esta herida
porque es lo único tuyo que realmente me queda

así que podemos seguir batallando
que la noche es joven y también lo somos nosotros
que me sobran las granadas y las pistolas
que después de todo

yo no conozco otra paz que no sea la de tus ojos

Lo que nunca pude decirteWhere stories live. Discover now