The Slytherin Method - ArtemisLiCa

Capítulo 35.- Suerte

Después de la cena luego del primer día de clases desde que Harry había regresado, Harry estaba saliendo del Gran Comedor cuando escuchó a alguien llamarlo por su nombre. Parado en el pasillo detrás de él estaba el Director.

—Harry, tengo algo de lo que me gustaría hablar contigo. ¿Si tú pudieras? —.

Harry les dijo a sus amigos que los vería más tarde y se acercó a Dumbledore—¿Sí? —.

Dumbledore echó un rápido vistazo alrededor—Harry, esta noche no vi a Severus en la cena. Tenía la esperanza de hablarles a los dos. ¿Serías tan amable de ir a buscarlo por mí? Tráelo a mi oficina, si puedes. La contraseña es "pluma de azúcar"—Con eso, el hombre dio media vuelta y se alejó caminando.

Harry lo miró incrédulo por un momento y luego negó con la cabeza y se giró hacia las mazmorras. "Se supone que este hombre es inteligente. Él es el jefe de la Orden. ¿Y no cree que parecerá sospechoso si voy a buscar a Severus por él?" Harry negó con la cabeza otra vez.

Mientras bajaba los escalones, Harry tuvo una idea. Él comenzó a sonreír. Para cuando llegó a la puerta de la oficina de Severus, estaba silbando. Antes de estirar el brazo para tocar a la puerta, Harry cambió sus gestos para evitar delatarse.

—Adelante—La voz oscura de Severus hizo estremecer a Harry. "Solo han pasado unos días, pero aun así, ha sido demasiado tiempo".

Harry entró y cerró la puerta detrás de él. Cerró la puerta y colocó un hechizo silenciador rápido. Él sonrió ante la mirada hambrienta que Severus le estaba dando.

—¿Qué estás haciendo aquí, Harry? Sabes que no podemos arriesgar...—.

—Tengo una muy buena excusa, lo prometo—Harry comenzó a merodear por la habitación.

Severus apartó su silla de su escritorio y comenzó a pararse, pero Harry llegó allí primero. En lugar de pararse, Severus se encontró sentado en su silla con Harry inclinándose para besarlo. Harry se aseguró de que fuera un beso caliente y hambriento. Puso una mano en el sedoso cabello hasta los hombros y corrió con la otra por el pecho de su amante. Jugó con un pezón a través de las túnicas de Severus.

Harry separó las rodillas de Severus con las piernas y luego se dejó caer de rodillas entre los pies del hombre. Logró hacer esto sin romper el beso. La mano que jugaba con el pezón se movió hacia abajo, acariciando el estómago del otro hombre y luego se instaló sobre la dura erección debajo. Harry frotó y sintió que la polla de su profesor se hacía más dura.

El beso se rompió y ambos jadearon por respirar. Severus echó su cabeza hacia atrás contra el respaldo de su silla. Harry tiró del cuello de su túnica, tirando de ella hacia abajo lo suficiente como para poder dejar una marca donde el cuello y el hombro de Severus se encontraron. Severus gimió ante la acción. Harry gentilmente apretó la polla dura que acariciaba.

Severus gimió de nuevo y soltó su agarre de nudillos blancos en el brazo de su silla y enterró la mano en el cabello de Harry y movió la otra hacia arriba y abajo de su espalda. Cuando Harry lamió la marca que había chupado, Severus gimió—¡Oh, Dios, Harry! —.

Harry de repente retrocedió—Oh, Sev. Se suponía que debía decirte que el Director quiere hablar con nosotros en su oficina—Harry se puso de pie y se volvió hacia la puerta.

Severus se quedó allí sentado mirando aturdido—¿Qué? —.

Harry le dio una dulce sonrisa—Tenemos que irnos—.

Severus parpadeó, luego lo miró—Vas a...—.

—¿Hacerte a ti lo que me hiciste? Sí, creo que lo hice. Ya sabes lo que dicen sobre la venganza—Harry le dio otra sonrisa brillante.