Capítulo 20

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Y cuando llegó a su apartamento se le erizó el vello de la nuca al encontrarse la puerta ligeramente abierta. En ese momento supo que preferiría toparse con un ladrón antes que tener que enfrentarse a la persona que sabía que estaba esperándola. Y también sabía que de nada le serviría salir corriendo. Con el corazón latiéndole a mil por hora, empujó la puerta.

Christopher Vélez estaba junto al sofá. Llevaba unos pantalones vaqueros oscuros que se aferraban a sus poderosos muslos y un polo oscuro y una chaqueta de cuero marrón que lo hacía parecer diabólico e impresionantemente guapo. No pudo hablar al detenerse en el umbral de la puerta. Ni siquiera se molestó en preguntarle cómo había entrado.

Sin dejar de mirarla, él sacó un pedazo de papel y le preguntó:

—¿Por qué te está chantajeando Sebastian Mortimer?

—¿Cómo te atreves a fisgonear entre mis cosas privadas? —aterrorizada, se acercó para quitarle la carta, pero Christopher la agarró del brazo y apartó la carta.

—¿Por qué te está chantajeando Sebastian Mortimer? —repitió con dureza.

—Porque no me acosté con él — intentó soltarse, pero él no se lo permitió. —Pagó las deudas de Joaquín sin que yo lo supiera y esperaba que le mostrara mi gratitud... —tragó saliva— convirtiéndome en su amante —se estremeció al recordar cómo había intentado forzarla.

Christopher seguía agarrándola del brazo y, por alguna estúpida razón, ella se sintió protegida.

—Está amenazándome con hacerme pagar la deuda si no cambio de opinión.

—Pero debía de estar muy seguro de cuál iba a ser tu respuesta si pagó la deuda por adelantado.

_____ se sintió dolida por el comentario. Lo cierto era que Sebastian era un sociópata arrogante que tenía una noción exagerada de su atractivo. Como confidente de Joaquín, sabía lo vulnerable que era ella y había dado por hecho que _____ se iría con él si le solucionaba el tema de las deudas. Al ver que no fue así, se volvió desagradable instantáneamente.

—Bueno, pues no recibió la respuesta que esperaba.

—¿Te hizo daño? —le preguntó Christopher apretándole el brazo con más fuerza.

_____ contuvo el aliento mientras recordaba lo aterrorizada que había estado aquel día al ver a Mortimer acercándose más y más a ella, al intentar calmarlo, al buscar una forma de escapar de él...

—No... el... el conserje apareció en la puerta y pude librarme de él antes de que pasara nada.

Christopher miró a Cara y, para su sorpresa, no tuvo duda de que el terror que veía en el rostro de la joven era real, creía en ella, y eso era porque finalmente había tenido que admitir que también la creyó la noche anterior cuando le dijo que era virgen el día que se conocieron. Las señales que había ignorado aquella noche eran algo que no se podía negar.

Pero entonces, ¿por qué _____ había aceptado lo que Mortimer le había dado? ¿Y qué hacía en el club aquella noche? Seguramente estaba buscando un pez más gordo al que engatusar y él, como un tonto, había mordido el anzuelo...

_____ estaba temblando, el modo en que su cuerpo había reaccionado al ver a Christopher resultaba perturbador. Finalmente logró soltarse y dio un paso atrás.

—Y antes de que me acuses de eso, tengo que decirte que yo no tuve nada que ver con el circo mediático que se organizó anoche en el hotel.

Christopher enarcó una ceja con gesto de incredulidad y dio un paso al frente, ante lo que ella respondió dando un paso más atrás.

—Lo siento, pero no me lo creo. Tú lo planeaste todo porque ahora has encontrado el modo de reclamar tu gran premio. Después de todo, si Valeria se hubiera casado con tu hermano, su herencia era sólo una parte de lo que yo tengo. Eres una chica lista. Debes de haberte felicitado por haber logrado reservar tu virginidad para el mejor postor... ¿o es simplemente que Mortimer no te gustaba físicamente? Tal vez estabas pensando volver al lado de Mortimer si no encontrabas antes un protector más atractivo y más rico.

CRUEL VENGANZATempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang