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♡ Treinta Y Siete ♡

Lissa

Eran las 8 de la mañana y me encontraba en la cama junto a Alex, preocupada por Luke. Luego de su llamada la noche anterior no había tenido noticias de él, lo que me preocupaba demasiado. Le había avisado a Danna para averiguar si ella sabía algo de su paradero a lo que me contestó que seguramente se había quedado dormido en la oficina.

Estaba angustiada, no quería pensar cosas erróneas o peor aún, pero mi mente me torturaba con malos pensamientos de lo que le podía haber pasado.

Mi celular sonó y al observar que era un mensaje de Luke rápidamente lo abrí.

“Hola Lis, lamento haberte asustado, estoy bien. Al salir del trabajo pasaré por la casa para explicarte lo sucedido. Te amo con mi vida.—Luke”

Suspiré en alivio al saber que el estaba bien, supuse que seguramente Danna tenía razón, no tenía que preocuparme.

Observé a mi lado a mi pequeño quien dormía con tranquilidad y sonreí. Podía dormir tranquila un rato junto a él luego de no haber pegado un ojo durante toda la noche.
Me abracé a su pequeño cuerpo y suspire con una sonrisa en mis labios al saber que todo estaba bien.

~*~*~

Estaba en la casa preparando las últimas cosas para el cumpleaños de mi niño. Era viernes y al día siguiente festejariamos el primer año de Alex, estaba bastante estresada, pues quería que todo saliese perfecto, pero gracias a la ayuda de mi madre, Jasse y Danna podía relajarme un poco.

La puesta sonó y mi madre dejó los globos a un lado para ir a abrir, yo seguí rellenando las bolsas de dulces que regalaríamos por asistir.

— ¡Danna! ¡Que gusto verte! —oí a mi madre saludarla, ella ingreso a la sala con una sonrisa ladinea de lado.

—Hola Liss. —Me observaba algo preocupada.

—Hola amiga. —me levante para abrazarla —Llegas a tiempo para ayudarnos con los globos. —Le enseñé la gran pila de globos que debíamos inflar.

—Claro, siempre aquí para ti. —Me sonrió y se sentó en el suelo. —¿Cómo te encuentras? —me observó intrigada.

—Bien, estresada por la fiesta pero bien. —Sonreí.

—¿Has... ¿Has hablado con Luke? —inquirió preocupada.

—Sí, a la mañana me mando un mensaje, tenias razón, seguro se quedó dormido en su trabajo. Me dijo que a la tarde vendrá para contármelo. —Hablé tranquila, ella hizo una mueca de lado y siguió inflando el globo que había tomado. —¿Qué sucede? —La mire extrañada. Ella me observó y se negó a sí misma.

—No es nada. —sonrió de lado.

— ¿Pasó algo anoche que deba saber? Vamos Danna, sabes que puedes contar conmigo amiga. —me acerqué a su lado. —¿Qué sucede? —Ella me miró algo nerviosa, podía notar en sus ojos que algo le ocurría.

—Liss... Yo... —Sus labios temblaban como solían hacerlo al estar ocultando algo que la preocupaba. —Yo...

—Tu... —tome su mano para darle confianza y ella me observó a los ojos. —Suéltalo amiga, estoy aquí para ti. —le sonreí con ternura. Ella suspiró y cerró sus ojos.

—Yo... —tragó saliva y me observó. —Estoy muy nerviosa por presentarlos a Marco, mañana en la fiesta. —Habló apenada. —es decir... Es mi primer novio y en verdad quiero que les agrade. —Sonreí ante su miedo y la abracé con cariño.

—Amiga, no tengas miedo, veras que lo amaremos como a ti. —la observe a los ojos. —Sabes que lo aceptaremos con gusto porqué a ti te hace feliz y eso es lo que importa. —Ella me observo con una sonrisa de lado. —Tu aceptaste mi amor por Luke, cuando seguramente ningún otra persona lo hubiese hecho. Eres la mejor amiga de este mundo Danna y seria una persona horrible si no aceptara a el chico que hace muy feliz a mi amiga. —Ella seco las pequeñas lágrimas que corrieron por su mejilla y me abrazó con fuerza.