Pure & Beauty © |lrh|

♡ Treinta Y Nueve ♡

Lissa.

La fiesta de Alex había sido grandiosa, mi pequeño había estado todo el día riendo y jugando con los niños del vecindario. Muchos vecinos me felicitaron por la fiesta y agradecieron haber sido invitados.

Al anochecer, Danna, Marco y Jasse me ayudaron a llevar las cosas nuevamente a la casa, mi madre estaba tan cansada que le pedí que fuera a descansar, y aunque me insistió quedarse para ayudar a limpiar, no tuvo más remedio que ir a dormir.

Danna y Marco se habían marchado, y Jasse era el único que se había quedado a ayudarme. Ambos nos encontrábamos en la cocina lavando la gran cantidad de platos y cubiertos que habíamos utilizado.

No me había dado cuenta hasta que la fiesta acabó que Luke se había marchado. No sabía que hacer, mi corazón pedía a gritos que lo perdonara, que le diese una nueva oportunidad, pero mi razón me lo impedía. Habíamos pasado por demasiado dolor, y aunque el amor fuese más fuerte, sentía que el destino nos hablaba, y no era nada lindo lo que decía.

—Lis... —Giré mi vista hacia Jasse y el sonrió de lado.— ¿Estas bien? —lo observé por unos momentos para luego asentir. Mi cuerpo estaba a su lado, pero mi mente estaba perdida en mis pensamientos.

—Sí... Sí yo...—Suspiré. —Lo siento. Estoy... Estoy algo perdida. —Él dejó de fregar el plato y se apoyó contra el fregadero.

—Es por Luke ¿Cierto? —Lo observé a los ojos, sabía cuando mentía, no servía de nada mentirle. —No sé qué sucedió entre ustedes pero sabes que puedes contar conmigo. Sé que no fui un buen novio, y me gustaría arreglarlo siendo un buen amigo. —Sonreí con ternura al oír sus palabras apenadas.

—Siempre fuiste un bien amigo Jasse, incluso un buen novio. —Él me observó con una sonrisa de lado.

—Un buen novio no te abandona cuando hay una vida de por medio ni te obliga a decidir que hacer para seguir juntos. —Él suspiro y me observó.

—Tal vez fuiste un tonto antes, pero mírate.—lo animé —Eres otra persona, el Jasse del que me había enamorado. —Sus ojos brillaron antes mis palabras.

—Y tu siempre serás la Lis que amaré. —No pude evitar sinrojarme ante sus palabras, el acarició mi mejilla y luego acomodó un cabello detrás de mi oreja.

Sus ojos divagaban entre los míos y mis labios. No sé cómo sucedió pero pronto nuestros labios se estaban rosando, cuando sentí su boca sobre la mia un nudo se formó en mi pecho. Si, estaba besando a alguien que quería, pero no a la persona que en verdad amaba. Nos separamos lentamente y lo observé a los ojos dolida.

—Lo siento Jasse... No puedo. —Suspiré alejándome de sus brazos.

—Lo siento, yo... No quise incomodarte.—Podia ver la tristeza en sus ojos.

—No tienes que disculparte, pero no quiero que te hagas falsas ilusiones. Aun amo a Luke. —Hablé apenada.

—Lo sé yo... Lo lamento. —Se disculpó sonrojado. —Yo... Mejor ya me voy. —Asentí lentamente y lo vi marcharse. Suspiré apoyándome contra el fregadero, sintiéndome horrible por lo sucedido.

Estaba perdida, en verdad no sabía que hacer conmigo misma...

Danna

Luego de la fiesta de Alex y ayudar a Lis a limpiar fui con Marco a la casa. Estaba algo distraída pensando en lo que había sucedido con mi padre.

—¿Estas bien, Dan? —observé a mi novio y asentí, el sonrió de lado y acarició mi mejilla intentando que dijese la verdad. —Puedes confiar en mi, amor.