𝕽𝖔𝖇𝖇𝖊𝖗𝖘 [𝕭.𝕻]

𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 𝙫𝙚𝙞𝙣𝙩𝙞𝙩𝙧𝙚𝙨

𝐁𝐎𝐑𝐈𝐒.

La noche era tranquila y  callada, me encontraba caminando por las calles sin rumbo alguno, aunque no sabía en donde estaba, solo pude asegurar que no eran Las Vegas, y que yo no era el mismo de siempre, era mas alto, quizá mas viejo, todo esto comenzó a ser confuso, pero no me detuve, seguí caminando.

Me detuve en frente de un bar, en la acera, una chica de cabello corto y extrañamente familiar se encontraba de espaldas, una sensación de conocerla vino a mi, pero seguía sin entender nada, poco a poco, me acerqué a ella, quien seguía en su propio mundo, ya lo suficientemente cerca, toqué su hombro para llamar su atención, ella se dio la vuelta hacia mi, no reconocí su rostro, y desperté.

-¿Estás bien? Parece que tuvieras fiebre.- Una Audrey vestida con una de mis camisas gastadas y un pantalón de pijama a cuadros me miraba con preocupación, aún no podía reaccionar, ¿y si esto era un sueño? Parpadeé un poco, no lo era.

-Solo fue un mal sueño.- Respondí mientras la abrazaba y ella se recostaba entre mi cuello y mi hombro, escondiendo su rostro, no quería preocuparla, así que comencé a acariciar su cabello, y funcionó, a los pocos minutos, su respiración se volvió suave y regular, tomé un suspiro y me relajé un poco, solo fue un mal sueño.

Sin darme cuenta, estaba dormido de nuevo, solo podía escuchar su nombre, "Audrey", pero misteriosamente, no podía recordarla, su rostro era un total misterio para mi, no sabía como lucía, no podía recordar su rostro, solo... Solo su nombre.

Audrey.

Semanas después, Audrey, Theo y yo pasamos la noche de acción de gracias comiendo los restos de comida que Xandra había traído, mientras que ella y el señor Decker iban a comer algo para celebrar, después de comer muy poco, Audrey dormía entre mis brazos, como si de un bebé se tratase, Theo y yo solo terminábamos nuestros cigarrillos en una silenciosa batalla.

-Hey Potter.- dije mientras soltaba una calada- Hace un tiempo, tuve un sueño bastante extraño.

-No me importa si estabas cogiendo con Audr- No lo dejé terminar, hice una mueca y casi grité-.

-¡No esa clase de sueño, tarado!- dije, incomodo.- Soñé con ella, si, pero... Se sentía como si ella no fuera ella, digo, no recordaba su rostro, era una extraña, pero conocía su nombre, es... No puedo explicarlo, Theo, es simplemente confuso.- Expliqué como pude, mientras acariciaba el cabello de Audrey, no se porque aquel sueño me dejó la sensación de que se iría, lejos, muy lejos, y no quería perderla, la idea de que su nombre solo fuera eso, otro nombre, me aterraba.

-Solo fue un sueño Boris, ella esta aquí contigo, no piensa irse, o al menos, no lo hará en un buen tiempo, créeme.- Potter se miraba tranquilo, y decidí no replicar, miré sus labios, luego sus ojos y mire su nariz fijamente, un chico de rasgos finos, delicados, sin dudar, un chico lindo.

-Supongo que tienes razón.- miré a Audrey, quien dormía plácidamente entre mis brazos, esta era la mejor manera de pasar las fiestas, creo.

Aparte, debo de dar gracias, ¿no? Gracias a Audrey, gracias a aquella chica conocí el temor de perder a alguien que amas, y gracias a ella, también entendí que puedo amar de esta manera.

La noche a su lado fue increíble, verla dormir fue algo genial, la manera en que su pecho subía y bajaba con suavidad era una maravilla, las pequeñas manchas en su piel, su cabello casi azabache cayendo por su rostro como ríos, sus labios, rojos, secos y rotos se veían como lo mas suave del universo, simplemente puede que ella se vea asquerosa, pero no podía dejar de encontrar perfección en cada uno de sus defectos, podía contar las razones por las cuales ella diría que es "fea" y seguir convencido de que ella todo lo contrario, era tan bonita como una botella de Vodka nueva.

El teléfono sonó, Theo estaba a nada de quedarse dormido, así que fui a contestar.

-¿Hola?- pregunté.

-¿Boris?- Era Tom, su acento Yankee era muy notorio.- Soy Tom, ¿Audrey está contigo?- asentí, pero me di cuenta de que no me podría ver.

-Si, pero esta dormida, ¿Qué pasa?- La preocupación poco a poco comenzaba a ser mas grande.

-Tengo que hablar con ella- dijo, y un fuerte suspiro sonó del otro lado de la línea- Boris, se que esto no te va a gustar, y mucho menos a ella...- siguió hablando.

Aquellas cuantas palabras fueron suficientes para colgar de repente e ir a buscar la bebida más fuerte que quedara, solo encontré Whisky, pero eso era mas que suficiente.

"Nos iremos después de año nuevo"

Solo esas pocas malditas palabras me hicieron acabar una botella entera, Audrey se iría, lejos, se que se ira lejos, siempre es así, ¿Por qué demonios se irá? ¿Por qué demonios ahora? ¿Por qué cuando todo comienza a ser increíble para todos la vida quiere apartarla de mi lado? Todo es un maldito chiste sin sentido, sin ella, nada valdría la maldita pena.

Pensé que no se iría nunca, pero lo hará, y hasta ahí llegara mi maldita historia de amor, conocerá a alguien mejor y yo solo me voy a ahogar en bebidas baratas hasta que muera en un departamento, sin ella, triste, solo. Todo es una maldita estupidez, una porquería, de repente, todo perdió valor.

Sin Audrey, todo era un sin sentido.