𝘾𝙖𝙥𝙞𝙩𝙪𝙡𝙤 𝙩𝙧𝙚𝙞𝙣𝙩𝙖 𝙮 𝙪𝙣𝙤

1K 114 71
                                    


𝐀𝐔𝐃𝐑𝐄𝐘.

Querido Tom.

Lo siento por haberme ido de casa sin avisar, deje todo en orden y tengo tus regalos conmigo, perdona que haya roto tu jarrón, estaba intentando imitar a Madonna y me caí, lo siento muchísimo.

Boris y yo decidimos vivir juntos como dos adolescentes extremistas y rebeldes, espero no te moleste y que puedas entenderlo, te amo, y espero algún día volver a casa, no te preocupes por mi, voy a buscarte cuando las cosas sean mejores, y espero, que para ese tiempo, Malcolm sea tu prometido o algo más, no puedo esperar a tener dos padres e ir al cine a tirarle palomitas a la gente ruidosa.

Sin mucho más que decir, lo siento, te enviaré una postal.

Con amor, Audrey.

-¿Lista?- Preguntó Boris mientras entraba a la habitación, guarde la carta en un sobre mientras él tomaba mi mochila, asentí y deje la carta en la cama, dejando un beso en el sobre crema y suspirando por dejar las cosas así.

Comencé a dudar de que tan buena idea era, pero no quería dejar a Boris, así que supuse que estaba bien hacer esto.

Los dos salimos del apartamento, Tom había salido con Malcolm a hacer las compras, y nos dirigimos a la casa de Theo, a mi insistencia de dejarle una carta.

Al llegar, entramos en la peor situación posible, habían varias personas vestidas de negro, bebiendo café o fumando, Xandra, con un vestido negro y la cara llena de lágrimas, me abrazó nada más al verme.

Larry Decker había muerto en un accidente de tráfico.

Eran las 7 y apenas comenzaba a atardecer, Theo decidió escapar con nosotros, así que comenzó a empacar, tomó el paquete envuelto en la funda de almohada, lo cual me preocupó (pues yo llevaba su cuadro en una pequeña bolsa de tela que llevaba al hombro) y al pequeño Popchyk.

Pedimos un taxi, mientras Theo decidió que lo mejor sería ir a Nueva York, Boris quería ir a Seattle, nunca supe si quedaban cerca o si eran el mismo lugar, pero no me importaba demasiado, sólo quería volver a casa.

-Deberían venir conmigo, podemos... Podemos comenzar todo juntos, hay una comunidad rusa, Boris, y escuelas de arte,  Audrey... No... No se vayan aparte, por favor.- Pidió Theo, rogando, parecía que olvidó el detalle de que yo iría a Nueva York de todos modos.

-No podemos ir allí.- dijo Boris, y yo decidí no opinar.

-Chicos, díganme que van a venir, Audrey...- Dijo y me miró, sus ojos brillaban amenazando con lluvias y su ceño fruncido me indicó que no quería ir solo.- Promete, por favor, que vendrás...- Pidió y mire a Boris.

-Iré, dame unos días, podremos ir.- Dije intentando animarlo, Boris frunció el ceño y Theo sonrió.

-Theo.- Boris lo llamó está vez, de repente, tomó sus mejillas y lo besó.
Fue demasiado rápido para todos, lo supe por la mirada perdida de Theo, aquello no había sido una sorpresa, pero si fue un pinchazo en el pecho, solo me quedé callada.

-Es hora, Audrey.- dijo Boris, tomó mi mano, y salimos corriendo de ahí.

Theo se había ido, nosotros también lo hicimos, y no podía asimilar todo lo que había pasado, ahora que lo pienso, no me despedí de Xandra, ni agradecí lo que había hecho por mi, aquello me hizo sentir mal, pero lo deje de lado y seguimos corriendo.




𝕽𝖔𝖇𝖇𝖊𝖗𝖘 [𝕭.𝕻]Where stories live. Discover now